La cosa más necesaria de que el cortesano tiene necesidad es tener en la corte un fiel y verdadero amigo, no para que le lisonjee, sino para que le reprenda.
Antonio de Guevara
Confesamos los defectos pequeños para persuadir a los demás que no los tenemos grandes.
Anónimo
Por los caminos de la revolución no llegaremos a la libertad; por los caminos dela revolución llegaremos sólo al despotismo.
Antonio Aparisi y Guijarro
Los hombres sienten desprecio por la religión y temor porque sea cierta. Para remediar esto, es necesario empezar por demostrar que la religión no es contraria a la razón; después, que es venerable y digna de respeto; a continuación, hacerla amable e inducir a los buenos a desear que sea cierta y por último, probar que lo es.
Blaise Pascal
La mediocridad para algunos es normal, la locura es poder ver más allá
Charly García
Quien no perdona a tiempo, sufre un tiempo.
Doménico Cieri Estrada
El sentimiento de culpa nos impide ver las cosas con claridad.
Doris Lessing
La vida nunca nos da lo que queremos en el momento que consideramos adecuado.
Edward Morgan Forster
Tras la desconfianza en el propio criterio, viene la inmoralidad en la vida.
Emilio Castelar
Hoy me odias y yo, feliz, me arrincono para llorarte...
Enrique Santos Discépolo
Estoy convencido hace tiempo de que la perfección sólo se produce accesoriamente y por azar; por tanto no merece el menor interés, pues la verdadera naturaleza de las cosas sólo se revela en la destrucción.
Italo Calvino
Vivo en un país tan grande que todo queda lejos: la educación, la comida, la vivienda.
Lina Zerón
Salamanca, Salamanca, renaciente maravilla, académica palanca de mi visión de Castilla.
Miguel de Unamuno
Queremos ser más felices que los demás, y eso es dificilísimo, porque siempre les imaginamos mucho más felices de lo que son en realidad.
Montesquieu
Si alguien busca la salud, pregúntale si está dispuesto a evitar en el futuro las causas de la enfermedad; en caso contrario, abstente de ayudarle.
Sócrates
Qué cerca sentimos a algunos que están muertos; y qué muertos nos parecen otros que aún viven.
Wolf Biermann