Para esos que solo admiten la naturaleza, no hay otra moral, a la larga, que la que cabe en el código penal; y aun ésta ha de guardarse allí muchas veces en vano.
Antonio Cánovas del Castillo
Los católicos masacraron a los reformados; los reformados masacraron a los católicos: en eso consistieron los primeros progresos de la libertad de pensamiento.
Anatole France
El verdadero combate empieza cuando uno debe luchar contra una parte de sí mismo. Pero uno sólo se convierte en un hombre cuando supera estos combates.
André Malraux
Es bastante más fácil ser caritativo que justo.
Arturo Graf
No quiero hacer marketing, quiero hacer música.
Avril Lavigne
Las ideas van por delante de los hechos. Y en la medida en que una sociedad restringe el alcance de la atención imponiendo marcos autoritarios, limita también las posibilidades de elección de sus miembros.
Daniel Goleman
Al contrario de lo que sucede con los símbolosconvencionales, los símbolos accidentales no pueden ser compartidos por nadie.
Erich Fromm
Dios es un pobre diablo, con un problema demasiado complicado para sus fuerzas. Lucha con la materia como un artista con su obra. Algunas veces, en algún momento logra ser Goya, pero generalmente es un desastre.
Ernesto Sabato
Existe algo común a todas las ideas y movimientos socialistas: el hecho de constituir una alternativa a una sociedad basada en el modo de producción capitalista.
Felipe González
La mejor manera de hacer carrera es transmitir a los demás la impresión de que ayudarte sería para ellos de gran provecho.
Jean de la Bruyere
Lo principal es reconocer que necesitamos ayuda, una vez hecho esto, la solución está a nuestro alcance.
Jorge González Moore
Hay punks que saben de dónde venimos, y hay fans que sus ricos padres pagan para que sean degenerados.
Mike Dirnt
El arco dice bajito a la flecha, al despedirla: tu libertad es mía.
Rabindranath Tagore
Poco nos hubiera dado naturaleza si más que a sí no nos diera.
Séneca
El amor no se asusta de nada.
Algunas veces debemos desechar los grandes pensamientos, y seguir los que las circunstancias nos inspiran.