No hay nada más terrible, insultante y deprimente que la banalidad.
Antón Chéjov
El estado es la máxima creación de la burguesía para que defienda sus bastardos intereses y cometa toda laya de injusticias con la clase dominada.
Alex Pimentel
El grado real de las libertades civiles depende de la capacidad de los ciudadanos, no de la concesión magnánima del Estado.
António de Oliveira Salazar
El amor faz sotil al home que es rudo, fàcele fablar fermoso al que antes es mudo, al home que es covarde fàcele atrevudo, al perezoso face ser presto e agudo.
Arcipreste de Hita
Cuando fui con todos mis kilos de sonatas y sinfonías bajo el brazo y se los di, le dije: Maestra, éste es mi premio, lo recibí yo, en fin, aquí están mis obras.
Astor Piazzolla
La maldad del mundo se hace posible sólo por la sanción que tú le das.
Ayn Rand
El consultar las cosas no es sino un tardar; no para las hacer de presto, sino para hacerlas a su tiempo.
Erasmo de Róterdam
Y que todo lo escrito en ellos era irrepetible desde siempre y para siempre, porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra.
Gabriel García Márquez
Al subir ante mi núrada la suave luna, que todo lo apacigua, flotan sobre mí, por el húmedo bosque, en las laderas rocosas, formas plateadas que dulcifican el deseo de contemplación.
Goethe
Las ideas fijas nos roen el alma con la tenacidad de las enfermedades incurables. Una vez que penetran en ella, la devoran, no le permiten ya pensar en nada ni tomar gusto a ninguna cosa.
Guy de Maupassant
Un hombre que ríe nunca será peligroso.
Horace Greeley
Pero más, más ternura trae la caricia. Lentas, las manos se demoran, vuelven, también contemplan.
Jorge Guillén
El Justicialismo no es un hombre, es una doctrina.
Juan Domingo Perón
los maleficios no pueden nada contra las personas que están unidas a Dios en la oración y que en la vida han hecho una clara opción a favor de Cristo.
Padre Gabriele Amorth
¿Qué mejor retrato de un escritor que mostrar a un hombre que ha quedado embrujado por los libros?
Paul Auster
Pero el Señor era generoso y le había conducido hasta el abismo de lo inevitable, para mostrarle que el hombre precisa escoger y no aceptar su destino.
Paulo Coelho