Las ideas son capitales que sólo ganan intereses entre las manos del talento.
Antoine de Rivarol
¿Creéis que entraría en negociaciones con esa mafia? Absolutamente no. No les vendería ni un virus. Esto es un no, por cierto. No hay acuerdo entre los clubes.
Alex Ferguson
Siento las cosas de modo distinto a cuando las digo.
Ana Frank
Cuanto más larga es la ausencia más duradera es la extrañeza de volver.
Antonio Muñoz Molina
La vida feliz y dichosa es el objeto único de toda la filosofía.
Cicerón
La mayoría de la gente considera la vida como una batalla, pero la vida no es una batalla sino un juego.
Florence Scovel Shinn
La impresión que tuve la primera vez que fui a Inglaterra es que, quitando las elites de las grandes ciudades y a Newton y Darwin, son unos bárbaros. Claro que eso es mucho quitar, pero los ritos antiguos, las familias comiendo un pedazo enorme de pierna de cordero, el modo de comportarse, el tipo burdo de trato... Y no digamos los alemanes.
Gustavo Bueno
El día de tu muerte sucederá que lo que tú posees en este mundo pasará a manos de otra persona. Pero lo que tú eres será tuyo por siempre.
Henry van Dyke
Aunque Dios mueve lentamente las ruedas de su molino, éstas muelen muy finamente; aunque pacientemente espera, el muele hasta el último grano.
Henry Wadsworth Longfellow
El crítico es un hombre que espera milagros.
James Gibbons Huneker
Para gobernar América hacen falta cojones. Y los elefantes tienen los cojones más grandes que los burros, así de simple, es genético.
Joël Dicker
No importa si no es más bello o si no conviene, el cambio se hace por el cambio mismo.
John Stuart Mill
Se templado en el beber, considerando que el vino demasiado ni guarda secreto ni cumple palabra.
Miguel de Cervantes
Sólo había una cosa que el perfume no podía hacer. No le podría convertirse en una persona que podía amar y ser amado como todos los demás. Así, al infierno con él, pensó. Al diablo con el mundo. Con el perfume. Con el mismo.
Patrick Süskind
Siempre pensé que las edades son todas crueles, y que se compensan o tendrían que compensarse las unas con las otras.
Silvina Ocampo
El hombre puede conservar su valor, su dignidad, su generosidad. O bien, en la dura lucha por la supervivencia, puede olvidar su dignidad humana y ser poco más que un animal, tal como nos ha recordado la psicología del prisionero en un campo de concentración.
Viktor Frankl