No hay hombre sin dolor; y si hay uno, ése no es un hombre.
Anónimo
La verdad mueve mundos... La verdad te hace sentir feliz... La verdad creo que es lo único que importa.
Albert Espinosa
¡Esto es el asqueroso paraíso del bicho!¡Parece un zoo!
Alberto Chicote
Serán asesinados por el mejor amante del mundo.
Chris Pratt
Solamente admitiendo la noche físicamente, se le ha llegado a aceptar moralmente. ¡Oh, noches de Young! ¡Cuántas jaquecas me habéis causado!
Conde de Lautréamont
La marcha de la mente humana es lenta.
Edmund Burke
Les daremos una actuación demente, les daremos causales de divorcio, les daremos una demostración de fuerza y, por supuesto un tour de force.
Freddie Mercury
Todas estas religiones profanas, portadoras de esperanzas escatológicas, se han extinguido.
Gilles Lipovetsky
No hay herejía ni filosofía tan odiosa para la Iglesia como el ser humano.
James Joyce
¡Es el camino de mi luna por encima de Dinamarca lo que hace resplandecer así mi cara!
Jens August Schade
Tienes bastante talento y virtudes, pero no hay que hacer ostentación, porque la vanidad estropea el carácter más fino.
Louisa May Alcott
Pensábamos en secretos. Auténticos secretos, e insidiosos. Tantos que eran incontables. Cuando ahora trato de dilucidar quién sabía qué y quién no sabía nada, quién lo sabía todo y quién era un farsante, tengo que parar y desistir, porque la cabeza me da vueltas.
Sarah Waters
No se confiesa obligado quien no recibió.
Séneca
La armonía de los colores debe fundarse únicamente en el principio del contacto adecuado con el alma humana, es decir, en lo que llamaremos el principio de la necesidad interior.
Vasili Kandinski
Convencido como estaba de que todo era una pura calamidad, tal idea no pareciera deprimirle sino, por el contrario, levantarle la moral.
Virginia Woolf
Los humildes, los mansos, los misericordiosos, los justos, los piadosos, los devotos pertenecen a una misma religión; y cuando la muerte los despoje de su máscara, se reconocerán los unos a loa otros, a pesar de las diversas libreas que aquí les hace mutuamente extraños.
William Penn