No lleves la corriente a nadie, ni por cortesía ni por cuquería. O calla o di tu verdad.
Ángel Ossorio
Soy incapaz de explorar mi inconsciente, pero el piloto del barco, a pesar de los remolinos, sigo siendo yo.
Albert Jacquard
Ordinariamente, uno se convence mejor por las razones que encuentra por sí mismo que por aquellas que proceden del espíritu de los demás.
Blaise Pascal
Y aunque Pinocho era un muchacho de natural muy alegre, se puso también triste; porque cuando la miseria es grande y verdadera, hasta los mismos niños la comprenden y la sienten.
Carlo Collodi
Reírse con otro es el mayor síntoma de amor.
Carmen Martín Gaite
Sin música para decorarlo, el tiempo es sólo un puñado de aburridos plazos límite de producción o fechas en las cuales deben pagarse las cuentas.
Frank Zappa
Porque, ¡miren!, el reino de Dios está en medio de ustedes. (Lucas 17:21)
Jesús de Nazaret
Muere un amor en mitad de la esperanza y un silencio sepulta su cadáver de pájaro.
Jorge Debravo
La unidad de pensamiento, que de ningún modo quiere decir la servidumbre de la opinión, es sin duda condición indispensable del éxito de todo programa político.
José Martí
Para la ciencia no debe existir posibilidad de contradicción, y allí donde se presenta concluye el discurso científico.
Juan Benet
Al amigo pienso yo que han de pedirse las cosas graves y dificultosas, mas las ilícitas no.
Juan Ruiz de Alarcón
El Maestro mantiene su mente siempre en unidad con el Tao; esto es lo que le hace resplandecer. El Tao es inasible. ¿Cómo puede su mente ser una con él? Porque no se aferra a idea alguna. El Tao es oscuro e insondable. ¿Cómo puede hacerle resplandecer? Porque él se lo permite. Desde antes de que fueran el tiempo y el espacio, el Tao es. Está más allá del Ser y del No Ser. ¿Cómo sé que esto es así? Miro en mi interior y veo.
Lao-Tse
Hacerse mayor es percibir más los defectos.
Marcela Serrano
La búsqueda de dios es una ocupación inútil, pues no hay nada que buscar donde nada existe. A los dioses no se les busca, se les crea.
Máximo Gorki
¡Zeus, sí! ¡Como el padre de Apolo, el del monte Olimpo, el de no me toques los cojones o te meto un rayo por el culo!
Samuel L. Jackson
Nuestra vida nunca es rectilínea ni la gobierna la lógica.
Vicente Blasco Ibáñez