Las personas con un gran ego necesitan ser el centro de atención, ansían reconocimiento y les preocupa muy poco los demás. Por el contrario, una saludable autoestima nos permite respetar nuestros propios deseos y también los de los demás.
Andrew Matthews
La vida es una agitada carrera por alcanzar la meta de llegada a la muerte.
Adolfo Caballero Guirado
Desde una ingenua simplicidad se llega a la más profunda sencillez.
Albert Schweitzer
Como ustedes saben, yo soy un inmigrante. Yo vine aquí como inmigrante, y lo que me dio las oportunidades, lo que me hizo estar aquí hoy, son los brazos abiertos de los estadounidenses. Me han recibido. He sido adoptado por los Estados Unidos.
Arnold Schwarzenegger
¿Qué nos importa que los impuestos suban o bajen? Gracias a nuestra fortuna, nosotros no pagamos ninguno.
Charles Churchill
Todas las tonterías estereotipadas para uso de los enamorados, que las usan sin variar en cada caso, parecen siempre encantadoras a las mujeres, y solamente leídas con frialdad pueden parecer pobres de ingenio. El gesto, el acento, la mirada de un joven les dan valores incalculables.
Honoré de Balzac
La guerra, por su naturaleza, es un fenómeno cruel. Una guerra interna entre hermanos, doblemente cruel.
Jorge Rafael Videla
Conozco la fecha pero no el día en que nací.
Juan Gelman
Patriotas de sus propios intereses y a los que nada importa la degradación moral.
Julia Navarro
Cambiaría el mundo si sólo enviara libros en lugar de enviar armas a otros países. (Frase dirigida al Presidente Barack Obama)
Malala Yousafzai
A veces, las cosas más sencillas y normales podían convertirse en acontecimientos extraordinarios, simplemente si las llevaban a cabo las personas adecuadas.
Nicholas Sparks
La inspiración es el fruto más delicado de la memoria.
Sergio Pitol
Desde el momento en que uno no puede esperar vengarse, comienza a odiar.
Stendhal
Una cara mentirosa debe ocultar lo que sabe un corazón falso.
William Shakespeare
Muestra tu valor y envaina la espada.
Trabajar con amor es construir una casa con cariño, como si vuestro ser amado fuera a habitar en esa casa.
Yibrán Jalil Yibrán