Tengo, novia, tengo novia.
Andrés López
En los momentos más terribles de la vida solemos caer en una suerte de irresponsabilidad protectora y en vez de pensar en lo que nos ocurre dirigimos la atención a trivialidades.
Adolfo Bioy Casares
Es más fácil combatir por un principio que practicarlo.
Alfred Adler
El mejor guerrero no es el que triunfa siempre, sino el que vuelve sin miedo a la batalla.
Dolores Ibárruri
Se quién eres y di lo que sientes, porque aquellos a quienes les importe no importan, y a aquellos quienes importan, no les importa.
Dr. Seuss
No hay palanca más poderosa que una creencia para mover las multitudes humanas; no en vano se dice que la religión liga y aprieta a los hombres.
Emilia Pardo Bazán
Las depuraciones evidentemente nos han perjudicado. Hemos ganado jugando un partido con todo en contra. Le hemos ganado incluso al árbitro. En vez de depurar desde la Corte al pueblo, el pueblo debía depurar a la Corte. Si yo fuera miembro de esa Corte, sería el primero en renunciar.
Evo Morales
Puede uno estar dispuesto a todo; pero no a la ingratitud de un amigo.
Filippo Pananti
Siempre me he considerado un hombre de mediana estatura, pero cuando miro a mi alrededor, no veo ningún gigante.
Giulio Andreotti
La fundamentación del Premio Rodolfo Walsh, para Chávez, suele ser más creativa, acaso, que la idea originariamente improvisada de concedérselo.
Jorge Asís
Confiar en todos es insensato; pero no confiar en nadie es neurótica torpeza.
Juvenal
Veo a Israel como uno de los grandes puestos de avanzada de la democracia - como un ejemplo maravilloso de lo que se puede hacer, de cómo el desierto puede convertirse en un oasis de democracia y fraternidad.
Martin Luther King
Hay muchas formas de conocer a una persona. Comerte el cerebro de su noviomuerto es uno de los métodos menos ortodoxos, pero...
Nicholas Hoult
El gato resbala en un rojo lago por las flores de cereza.
Niji Fuyuno
Crea tu propio estilo visual. Hazlo único para ti mismo e identificable para los demás.
Orson Welles
Acuérdate de mi esta noche, su voz sonó frágil y delgada y muy lejana.
Virginia Woolf