Siempre seguí la misma dirección, la difícil la que usa el salmón, siento llegar al vacío total de tu mano me voy a soltar.
Andrés Calamaro
Uno debe aprender a analizar con seguridad, y luego poner plena confianza en el computador con que la naturaleza nos ha dotado.
Aleksandr Kótov
Do non te quieren mucho, non vayas a menudo.
Arcipreste de Hita
Los exámenes son formidables incluso para el mejor preparado, ya que el mayor estúpido puede preguntar más de lo que el mayor sabio pueda responder.
Charles Caleb Colton
El doblaje de algún modo es un arte de imitación.
Constantino Romero
Si un individuo posee la base espiritual necesaria, no se dejará vencer por la tentación tecnológica y la locura de poseer. Sabrá encontrar el justo equilibrio, sin pedir demasiado. El peligro constante es abrir la puerta a la codicia, uno de nuestros más encarnizados enemigos, y ahí reside el verdadero trabajo del espíritu.
Dalai Lama
Julio. Tú quizá sueñas todavía con aquella antigua Iglesia en la que tú en compañía de algunos famélicos obispos hacías de ponttífice completamente inútil, sometido a la pobreza, al sudor, a los peligros y a mil inconvenientes.
Erasmo de Róterdam
En el escenario soy un gran macho, un objeto sexual y soy muy arrogante, así que la gente me rechaza por eso. Pero realmente no soy así. No saben realmente como soy por dentro.
Freddie Mercury
Has vivido pero no has disfrutado de la vida.
Harrison Ford
Es imposible ocultar el amor en los ojos del que ama.
John Crowne
A los que les gusta mucho la plata hay que correrlos de la política. Son un peligro.
José Mujica
Mientras el tigre no puede dejar de ser tigre, no puede destigrarse, el hombre vive en riesgo permanente de deshumanizarse.
José Ortega y Gasset
La naturaleza no pudo soportar mis emociones y buscó refugio en la insensibilidad.
Matthew Gregory Lewis
Instruir al cerebro es hacer efectivo el golpe del brazo; armar el brazo es dar fuerza a las concepciones del cerebro.
Práxedis G. Guerrero
La caridad es una virtud del corazón, no de las manos.
Thomas Alva Edison
No hay principio de filosofía o de religión que no pueda ser bien o mal aplicado; todo depende del corazón, de la índole de nuestro corazón.
Ugo Foscolo