En la Bolsa todo es posible, incluso lo lógico.
André Kostolany
El árbol bien cultivado se conoce por sus frutos, y el corazón del hombre por la expresión de sus pensamientos.
Anónimo
Eso era todo lo que un hombre necesitaba: esperanza. Era la falta de esperanza lo que hundía a un hombre.
Charles Bukowski
¡Cómo puede haber una orgía -incluso emplearse esta palabra- cuando ni siquiera se han insinuado los límites, debilidades o preferencias, ni tan sólo los hábitos y costumbres?
Doris Lessing
Quieres tener un futuro donde esperas que las cosas sean mejor, no uno donde esperas que las cosas sean peor.
Elon Musk
Es impío no el que suprime a los Dioses, sino el que los conforma a las opiniones de los mortales.
Epicuro
..., con la cara más dura que una piedra, hemos depuesto todo pudor, abandonado todo sentido de la vergüenza e imitamos, igualamos, dejamos atrás a los paganos en avaricia, ambición, lujo, fasto, tiranía.
Erasmo de Róterdam
Soy una mujer del sur y es la clase de mujer sobre la que Tennessee Williams escribió.
Faye Dunaway
Sólo obedeciéndola se doblega a la naturaleza.
Francis Bacon
Haz lo que decimos y no hagas lo que hacemos.
Giovanni Boccaccio
Si no quieres acabar en un manicomio, abre tu corazón y abandónate al curso natural de la vida.
Haruki Murakami
Las ciencias, las artes, y el comercio son una de las columnas más fuertes del edificio social, pero nunca serán la base. La sociedad descansa sobre un cimiento más sólido; sobre la moral.
Jerónimo Usera
Que terriblemente triste es que las personas están hechas de tal forma que se acostumbran a algo tan extraordinario como la vida.
Jostein Gaarder
Para mí, es duro ser ciclista, entrenar y sufrir, correr y sufrir. Pero no tiene ni punto de comparación con estar tumbado en una cama con tubos saliendo de tu pecho, sintiendo náuseas fortísimas, vomitando durante las 24 horas del día cinco días seguidos y luego volver a hacerlo todo dos semanas después.
Lance Armstrong
Trabajamos en unas cuarenta mil aldeas. Prestamos 2,4 millones de dólares y el 94% de nuestros clientes son mujeres. Y el banco les pertenece.
Muhammad Yunus
El cotilleo era algo más que una de las inclinaciones genéricas y vulgares del ser humano, originada en la recíproca animosidad, sino también uno de los instrumentos más eficaces entre las medidas de seguridad de la sociedad,
Sándor Márai