La realidad siempre se apresura a demostrarnos hasta qué punto carecemos de imaginación.
Amélie Nothomb
No sé con qué armas se luchará en la Tercera Guerra Mundial, pero sí sé con cuáles lo harán en la Cuarta Guerra Mundial: piedras y palos.
Albert Einstein
Me encantaría que nuestro país tuviera un arsenal inmenso de caricias bajo el mar; para que al caer la noche yo encienda dos velas para invadirte por sorpresa en la intimidad.
Amaia Montero
El hombre es propenso al error y puede engañarse; pero un sable se inclina siempre hacia lo justo.
Anatole France
Amores encontrarás como piedras en un rió, pero nunca encontrarás un amor como el mío.
Anónimo
Usted puede quitarle al hombre sus dioses, sólo dándole otros.
Carl Gustav Jung
Vivir es cambiar.
Homero Expósito
Porque todos los finales son el mismo repetido, y con tanto ruido, no escucharon el final.
Joaquín Sabina
La economía de mercado es un sistema social de división del trabajo basado en la propiedad privada de los medios de producción.
Ludwig von Mises
En la palma de la mano una luciérnaga. ¡Ah! Su frío reflejo.
Masaoka Shiki
Si Fernando Alonso ganara el título del 2007 sería una broma.
Niki Lauda
La vida está llena de pequeñas ironías.
Peter Dinklage
La apariencia posee la plenitud de la realidad, pero sólo en cuanto apariencia. En cuanto cosa distinta de apariencia, es error.
Simone Weil
No es posición, sino disposición.
Susan Sontag
El aumento de la productividad económica, que por un lado crea las condiciones para un mundo más justo, procura, por otro, al aparato técnico y a los grupos sociales que disponen de él una inmensa superioridad sobre el resto de la población. El individuo es anulado por completo frente a los poderes económicos.
Theodor Adorno
Desde los modelos estelares del cine a los protagonistas de novelas de amor, incluidas las emisiones de televisión para la mujer, la cultura de masas representa y propone casi siempre situaciones humanas que no tienen ninguna conexión con situaciones de los consumidores, pero que continúan siendo para ellos situaciones modelo.
Umberto Eco