La admiración es nuestro educado reconocimiento del parecido de alguien con nosotros.
Ambrose Bierce
Me pinto el cabello de negro para los encuentros amorosos, y de blanco para las reuniones de negocios.
Aristóteles Onassis
Cualquiera que llore por la justicia es un Wailer.
Bob Marley
Los libros son faros erigidos en el gran mar del tiempo.
Edwin Percy Whipple
La aldea, cuando se cría uno en ella y no sale de allí jamás, envilece, empobrece y embrutece.
Emilia Pardo Bazán
¡Oh, loca fantasía, qué palacios fabricas en el viento! Modera tu alegría, no sea que saltando de contento, al contemplar dichosa tu mudanza quiebre su cantarillo la esperanza!
Félix María de Samaniego
Cuando una mujer no tiene razón, debe comenzarse por pedirle perdón.
Francis de Croisset
Nuestros mejores éxitos vienen a menudo después de nuestras mayores decepciones.
Henry Ward Beecher
He fracasado en el intento de dedicar amor a las cuestiones políticas.
Hermann Hesse
Los animales se alimentan, el hombre come; sólo el hombre inteligente sabe cómo comer.
Jean Anthelme Brillat-Savarin
Mal haces si alabas, y peor si reprendes una cosa que no entiendes bien.
Leonardo da Vinci
La patria es un dolor que aún no sabe su nombre.
Leopoldo Marechal
Que puedas pues partir sin remordimientos y dejar este país familiar con un beso sobre mis cabellos y todo el futuro entre tus manos.
Margaret Mead
Cada segundo que vivimos es un momento nuevo y único del universo, un momento que jamás volverá.
Pablo Casals
Hay días extraños, como si uno despertara después de haber dormido durante años.
Ugo Betti
Aquellos días la iniciativa, alma de la guerra, estaba abanderada por los alemanes. Avanzaban y avanzaban sin cesar hacia delante, y toda la furia de los contraataques soviéticos no lograba detener su movimiento lento, pero aborreciblemente decidido.
Vasili Grossman