Desde el punto de vista moral, las palabras de Jesús significan: Pedid la luz que debe iluminar vuestro camino, y os será dada; pedid la fuerza para resistir el mal, y la tendréis; pedid la asistencia de los buenos espíritus, y vendrán a acompañaros, y como el ángel a Tobías, os servirán de guías; pedid buenos consejos y nunca os serán rehusados.