Los mayores progresos de la civilización se experimentan inicialmente como sus peores amenazas.
Alfred North Whitehead
No estaba preparado para la fama. Me golpeó fuerte y no tenía la capacidad de afrontarla.
Al Pacino
De regreso a Irlanda tenía por lo menos de seis a siete rupturas emocionales por día.
Anjelica Huston
El hombre no va a ninguna parte. Todo viene al hombre, como el mañana.
Antonio Porchia
Nuestra música simple, acompañada de actitud 'mala onda' desconcertaba a nuestros colegas. Eramos creídos y aunque los músicos nos encontraban 'malitos', les llamábamos la atención.
Claudio Narea
Tales obres son como espejos: si se mira un mono es imposible que refleje un hombre.
Georg Christoph Lichtenberg
España es una partitocracia.
Gustavo Bueno
Todas las malditas religiones, unas más que otras, son un atentando en contra: de la creatividad humana; del desarrollo de una menteracional y científica; de la filosofía; de la maravilla de pensar profunda y racionalmente.
Ismael Leandry Vega
El respeto a la vida es fundamento de cualquier otro derecho, incluidos los de la libertad.
Juan Pablo II
El recurso a la fuerza constituye siempre una derrota de la Humanidad.
La necesidad de señalar el desorden ajeno suele ser una señal de que estás descuidando el orden de tu propio espacio. Por eso debes empezar por eliminar tus propias cosas.
Marie Kondo
Si un hombre es mi amante, lo natural es que pague por los servicios prestados, ¿no cree usted?
Mata Hari
El amor no distingue de personas.
Molière
Una religión es tan cierto como la otra.
Robert Burton
Cuelgue con cuidado una luna llena en occidente, digamos a tres cuartas sobre el horizonte respectivo. Sobre oriente inicie, lentamente, el ascenso de un sol brillante y poderoso.
Subcomandante Marcos
Por los dioses, era mucho mejor cuando éramos apenas cuatro contra ese maldito gran dragón, pensó Vimes mientras caminaban. Desde luego, casi nos quemamos vivos varias veces, pero al menos no era complicado. Era un condenado gran dragón. Podías verlo venir. No se ponía político contigo.
Terry Pratchett