Se hacen tus ojos demasiado azules, cubren tus manos impalpables tules y algo divino te levanta en vuelo.
Alfonsina Storni
Creo que si, en el nacimiento de un niño, una madre pudiera pedirle al hada madrina dotarlo con el mejor regalo, éste sería la curiosidad.
Eleanor Roosevelt
No es un patriotismo deseable ir en contra del comportamiento civilizado.
Friedrich Dürrenmatt
Cuando oigo hablar de ideas liberales siempre me asombra ver como los hombres se entretienen tan a gusto con palabras hueras: ¡una idea no puede ser liberal! Deberá ser vigorosa, excelente y perfecta en sí misma para que cumpla con la divina misión de ser productiva. Menos aún podrá ser liberal un concepto, pues tiene una tarea totalmente distinta.
Goethe
El amor otorga en un momento lo que el trabajo puede conseguir apenas en largo tiempo.
El silencio es un gran arte para la conversación.
Henry Hazlitt
La verdad de la realidad no es lo ya hecho; eso es sólo una parte de la realidad. si no nos volvemos a lo que está haciéndose y a lo que está por hacer, se nos escapa la verdad de la realidad.
Ignacio Ellacuría
Vosotros estáis en pleno goce de vuestros derechos: ved ahí el fruto de mis.
José Gervasio Artigas
La riqueza exclusiva es injusta. Sea de muchos; no de los advenedizos, nuevas manos muertas, sino de los que honrada y laboriosamente la merezcan.
José Martí
Y con el corazón en la mano, que es como mejor se salta, cuando diga 4 vamos a irnos arriba como si nos fuera la vida...1, 2,3, ¡VA!...
Kutxi Romero
Estoy viejo, así que tengo que recorrer muchas imágenes. Pero acá hay mucho afecto, mucho cariño, mucho entusiasmo, y eso lo vivimos con gratitud.
Marcelo Bielsa
La amistad es, ante todo certidumbre, y eso es lo que la diferencia del amor.
Marguerite Yourcenar
Las eras existen en la historia por su anacronismo.
Oscar Wilde
El más grande de los hombres sencillos, nuestro maestro.
Pablo Neruda
Este mundo no va a cambiar a menos que estemos dispuestos a cambiar nosotros mismos.
Rigoberta Menchú
Los vivos eran los que no se daban cuenta de que sucedían cosas extrañas y maravillosas, porque la vida estaba demasiado llena de cosas aburridas y mundanas.
Terry Pratchett