La ciencia total sólo puede resultar de un esfuerzo total del hombre, es decir del conjunto del esfuerzo humano colectivo realizado por la evolución perfecta de la historia universal.
Siempre que el hombre reflexiona sobre su parte física o moral, suele generalmente hallarse enfermo.
Nadie se acordaría hoy del buen samaritano si además de buenas intenciones no hubiera tenido dinero.