Tus ojos penetrantes como el filo de una espada. Oh, mi Niña, yo no espero una cita deslumbrante; Tan sólo ansío ir a la hoguera por tu amor.
Aleksandr Blok
Examina siempre atentamente todo aquello que uno dice: las palabras nacen y al mismo tiempo desvelan el carácter de los hombres.
Catón
Para los valientes el encanto de la muerte no existe.
Conde de Lautréamont
Es difícil escribir y crear historias que mantengan la atención del público.
David Ogden Stiers
La religión es una cadena de oro que une la tierra con el cielo.
Edward Young
La vida me ha dado muchas cosas buenas, quizá demasiadas. Fama, éxito, dinero y, claro, amor. Mucho amor.
Gary Cooper
Las mujeres parece que no buscan su media naranja, sino, su medio limón porque buscan al hombre que las haga sufrir.
H.L. Weniger
Pereza y cobardía son las causas merced a las cuales tantos hombres continúan siendo con gusto menores de edad durante toda la vida, pese a que la naturaleza los haya librado hace ya tiempo de una conducción ajena (haciéndoles físicamente adultos); y por eso les ha resultado tan fácil a otros erigirse en tutores suyos.
Immanuel Kant
Una línea, una zona de color, no es realmente importante porque registre lo que uno ha visto, sino por lo que le llevará a seguir viendo.
John Berger
El humor y la sabiduría son las grandes esperanzas de nuestra cultura.
Konrad Lorenz
A cierta edad, un poco por amor propio, otro poco por picardía, las cosas que más deseamos son las que fingimos no desear.
Marcel Proust
La esperanza te tornará joven, porque la esperanza y la juventud son hijos de una misma madre, el amor constante.
Percy Bysshe Shelley
Muchas cosas son las que el tiempo cura, no las que la razón concierta.
Plutarco
Te amo con la irresponsabilidad que requiere el que ama de manera importante. Con incertidumbres, precipicios y variantes.
Roque Valero
El río Ankh es, probablemente, el único río del universo en el que los investigadores pueden dibujar con tiza el contorno de un cadáver.
Terry Pratchett
Bendita sea la parte de nosotros que nos protege de tanto dolor y tristeza. En el corazón de la vida hay una caja de fusibles.
Yann Martel