Enseguida un cantante que haga canciones de amor es un maricón. ¡Yo no soy maricón! Muchas veces me dan ganas de decir, y si lo fuera, ¿qué? Pues no pasaría nada. Va directamente relacionado con la inteligencia y la cultura de cada uno.
Alejandro Sanz
Mi persona está herida mi primera persona del singular.
Alejandra Pizarnik
El mal existe pero, las fuerzas del amor, la compasión y la bondad son poderosas.
Brian Weiss
Ya tiene la vida suficientes verdugos para que uno vaya haciendo doblete y ejerciendo de Torquemada con uno mismo.
Carlos Ruiz Zafón
Todo arrogancia es odiosa, pero la arrogancia del talento y de la elocuencia son de las más desagradables.
Cicerón
No solo el trabajo aplicado directamente a las mercancías afecta su valor, sino también el trabajo que se gasta en los instrumentos, herramientas y edificios de que se vale ese trabajo.
David Ricardo
El hombre que se ruboriza no es completamente una bestia.
Edward Young
La República de Colombia, a la vanguardia de la revolución en el mundo físico y moral, es el blanco de las empresas militares y debe ser el de las maquinaciones secretas de todos nuestros enemigos.
Francisco de Paula Santander
Los hombres están para abastecer a sus familias a cualquier precio.
Giancarlo Esposito
El Cristianismo, no sólo es capaz de inferir las verdades lógicas, sino qué, cuando sobreviene el absurdo, sabe acertar -digámoslo así- las verdades ilógicas.
Gilbert Keith Chesterton
El viaje no termina jamás. Solo los viajeros terminan. Y también ellos pueden subsistir en memoria, en recuerdo, en narración... El objetivo de un viaje es sólo el inicio de otro viaje.
José Saramago
Nunca es largo el camino que conduce a la casa de un amigo.
Juvenal
La debilidad del alma se manifiesta cuando para vivir necesitas saber quién fuiste y a qué viniste; cuando el vivir, es ser tú mismo.
Norys Uribe Santana
Sí, corazón, lo sé, lo sé, y se sabe: es a vida, es a muerte este destino.
Pablo Neruda
La puerta gira en sus bisagras y el perezoso gira en la cama.
Salomón
Toda mujer vulgar cree que basta exagerar el pudor para parecer distinguida.
Stendhal