Franz: ¿Y habéis hallado algún placer asistiendo a esos espectáculos?
Alejandro Dumas
El valor del arte está en el espectador.
Agnes Martin
La Meca del economista se encuentra en la biología económica más que en la dinámica.
Alfred Marshall
Aparta un amor viejo con un amor nuevo, como un clavo saca otro clavo.
Cicerón
No hay accidente, por desgraciado que sea, del que los hombres hábiles no obtengan provecho.
François de La Rochefoucauld
La cultura y el Estado -no nos engañemos sobre esto- son rivales: el Estado de cultura no pasa de ser una idea moderna. Lo uno vive de lo otro, lo uno prospera a costa de lo otro. Todas las épocas grandes de la cultura son épocas de decadencia política: lo que es grande en el sentido de la cultura ha sido apolítico, incluso antipolítico.
Friedrich Nietzsche
Lo que es muy raro es sentir debilidad, verdadera debilidad por alguien, y que nos la produzca, que nos haga débiles. Eso es lo determinante, que nos impida ser objetivos y nos desarme a perpetuidad.
Javier Marías
Si te digo que la amo tanto como te amaba a ti, entonces ya sabes el resto de la historia. Descansa en pazamor mio.
Kevin Costner
Lo único que conseguimos enfadándonos es aumentar el daño que hemos recibido y perder la claridad para hallar la solución.
Lama Zopa Rinpoché
A veces el silencio era lo más fácil si la única palabra que quedaba por pronunciar era adiós.
Lisa Kleypas
Existe un antiguo mito que sostiene que contar historias puede curarenfermedades o salvar; sin historias, viviríamos un presente viejo.
Marcela Serrano
Las únicas sociedades que han sido capaces de crear una prosperidad relativa ampliamente extendida han sido aquéllas que han confiado principalmente en los mercados capitalistas.
Milton Friedman
Bastante riqueza es no desear más.
Quintiliano
En amor, cuando el dinero se comparte se aumenta el amor; cuando se da, se mata el amor.
Stendhal
¿quiénes somos los seres humanos? Porque quienes somos determina la clase de gobierno que necesitamos.
Suzanne Collins
Las aventuras amorosas comienzan en champán y terminan en la manzanilla.
Valery Larbaud