La esperanza es el mejor médico que yo conozco.
Alejandro Dumas
Cuando el amor se termina, te sigue faltando algo.
Alejandro Sanz
Existen siempre mil males que son buenos para el zurdo.
Amaia Montero
Pero si lo infinito estuviera constituido por un número limitado de partes, cada una de éstas (quiero decir por ejemplo, el agua o el fuego) sería también, necesariamente, infinita. pero eso es imposible: pues se ha demostrado ya que ni la gravedad ni la levedad son infinitas.
Aristóteles
Ningún hombre puede enamorarse de una mujer que no le despierte el instintosexual.
Axel Munthe
¡Despertaos! Nunca seáis negligentes. Seguid la ley de la virtud. El que practica la virtud vive felizmente en este mundo y en el próximo.
Buda Gautama
Como le pasa a todo el mundo, no planeé mi vida, sucedió sin más.
Elizabeth Taylor
¡Ojalá el corazón se mantenga joven durante mucho tiempo!
Fiódor Dostoyevski
Vivimos con nuestros defectos igual que con nuestros olores corporales: nosotros no los percibimos y no molestan salvo a quienes están con nosotros.
Madame de Lambert
Si entras en este mundo sabiendo que eres amado y dejas este mundo sabiendo lo mismo, entonces todo lo que ocurre en el medio pueden ser tratado.
Michael Jackson
La cortesía es, ante todo, un buen negocio. Y que se ha de tener, sino en atención a los demás, por puro egoísmo.
Noel Clarasó
Las preguntas más importantes de la vida, de hecho, no son en su mayoría más que problemas de probabilidad.
Pierre Simon Laplace
El hombre no puede vivir solo para comer, beber y dormir. Una vez satisfechas las exigencias materiales, aparecerán con gran fuerza las necesidades a las que se atribuye un carácter artístico. Tantos individuos son equivalentes a tantos deseos, y estos son más variados cuanto más civilizada esté la sociedad y más desarrollado el hombre.
Piotr Kropotkin
Persiguiendo a un escritor se aumenta su prestigio.
Tácito
El método de investigación científica no es más que la expresión del modo necesario del funcionamiento de la mente humana.
Thomas Henry Huxley
Disfracemos como queramos nuestro cautiverio, es la mujer quien nos gobierna todavía.
Thomas Moore