Si extiendo una mano encuentro una puerta.
Aldo Pellegrini
Por más que sé que escribir es peligroso y que al hacerlo pones en riesgo tu vida, siempre acabo cayendo en la trampa.
Amélie Nothomb
Dos cosas, el amor de Dios y del prójimo, hacen perfecto al hombre.
Antonio de Padua
Alain, vuelve, te echo de menos.
Ayrton Senna
El amor no es más que un punto luminoso mas, sin embargo, parece abarcar todo el tiempo. Apenas existía hace pocos días, y en breve dejará de existir; pero mientras existe, derrama sus esplendores sobre la época que le ha precedido y la que le ha de seguir.
Benjamin Constant de Rebecque
Nuestras gentes son como las lagartijas, van tomando el color de la tierra, se meten a las chozas de donde salieron, vuelven a vestirse de peones y vuelven a esperar la hora de seguir peleando, aunque sea dentro de cien años.
Carlos Fuentes
¡Déjalo, Koba! No te pongas en ridículo. Todo el mundo sabe muy bien que la teoría no es tu fuerte.
David Riazánov
Si el Bien no existe, hay que inventarlo.
Eduardo Galeano
Qué plaga, qué aburrimiento, qué tedio es tener que tratarse con ellas mayor tiempo que los breves instantes en que son buenas para el placer.
Francisco de Quevedo
La educación ha logrado que las personas aprendan a leer, pero es incapaz de señalar lo que vale la pena leer.
George Travelyan
Busco en la ciencia alimento para mis visiones, en las que toda pesadez se disuelve.
Italo Calvino
¡Feliz quien, como Ulises, ha terminado un hermoso viaje!
Joachim du Bellay
Un amante apasionado ama hasta los defectos de la persona a quien ama.
Molière
El placer embota e incluso embrutece a algunos, pero si se sabe tomarlo como trampolín, ayuda a elevar la conciencia.
Ramiro A. Calle
Yo soy, yo existo, es necesariamente verdadera, cuantas veces la pronuncio o la concibo en mi espíritu.
René Descartes
Revístete de una naturaleza buena. Piensa bien de todos. Haz siempre buenas acciones. Sirve, ama, da. Haz felices a otros. Disfruta sirviendo a otros. Así cosecharás felicidad. Te verás rodeado de circunstancias y oportunidades favorables.
Swami Sivananda