Los intelectuales resuelven los problemas; los genios, los evitan.
Albert Einstein
El carácter es como un árbol y la reputación como una sombra, la sombra es lo que pensamos de el, el árbol es la cosa real.
Abraham Lincoln
Durante toda mi vida, y especialmente después de ganar el título de campeón, decían que era enemigo de los soviéticos. Eso me dolía profundamente y me impedía el contacto con el país en el que había nacido y al que nunca he dejado de querer.
Alexander Alekhine
Yo sigo los áureos consejos del vino, que el vino es a veces escala de ensueños.
Antonio Machado
La vida es maravillosa si no se le tiene miedo.
Charles Chaplin
Más cerca está de ser un hombre el que va desnudo, que el que va vestido de librea.
Charles Lamb
Consumo, sociedad de: Prodigioso envase lleno de nada. Invención de alto valor científico, que permite suprimir las necesidades reales, mediante la oportuna imposición de necesidades artificiales.
Eduardo Galeano
Pobre y desnuda vas, Filosofía, dice el vulgo que al lucro vil se entrega.
Francesco Petrarca
Su serenidad no era más que el adorno proporcionado por unas flores silvestres en las ruinas de sí mismo.
Henry James
Lo distinto de la tiranía global de hoy es que no tiene rostro. No es el Führer, ni Stalin ni un Cortés. Sus maniobras varían según cada continente y sus maneras se modifican de acuerdo a la historia local, pero su tendencia panorámica es la misma: una circularidad.
John Berger
La enseñanza debe ser por la acción. La educación es la vida; la escuela es la sociedad.
John Dewey
Trato de tener ilusiones para no envejecer. El ser humano debe tener nuevas metas; eso es lo importante en el diario vivir.
Manuel García Ferré
¿Y usted quién es? Un hombre ni demasiado joven ni demasiado viejo, ni demasiado guapo ni demasiado feo, con mucho pasado, pero... con más porvenir...
Mauricio Garcés
Este es el momento, esto es todo.
Michael Jackson
Cuanto más estudiamos la cuestión, tanto más estamos obligados a afirmar que la sociedad, en si, es responsable de las acciones antisociales cometidas en medio de ella; y que ningún castigo, ninguna cárcel y ningún verdugo puede disminuir el número de tales hechos; solamente puede hacerlo una reorganización de la sociedad misma.
Piotr Kropotkin
Sólo quiero que surjas en mí como la fe en los desesperados, para que yo pueda llevar una gota de rocío en esta tierra maldita que se quedó en mi carne como un estigma del pasado.
Vinicius de Moraes