La única cosa realmente valiosa es la intuición.
Albert Einstein
¿No estás harto de tener miedo? ¿De temer las consecuencias de tus actos?
Albert Espinosa
Nacimos gritando porque somos hijos de la revolución.
Alex Pimentel
Tristemente, sí. Cuanto más rico se hace uno, más pobre se hace otro. La diferencia es que aquí juegas para arruinar al contrario, pero al final recoges el tablero, guardas la caja y todos acabáis tan amigos.
Antonio Zafra
Para que al oponente se so meta a nuestra voluntad, debemos colocarlo en una tesitura más desventajosa que la que supone el sacrificio que le exigimos. Las desventajas de tal posición no tendrán que ser naturalmente transitorias, o al menos no tendrán que parecerlo, pues de lo contrario el oponente tendería a esperar momentos más favorables y se mostraría remiso a rendirse.
Carl von Clausewitz
El ruido de los tanques es ahora el ruido del Estado democrático.
Federico Trillo
No me gusta invertir en quimeras, me han traído hasta aquí tus caderas y no tu corazón.
Joaquín Sabina
El rojo es sangre, dolor, violencia, peligro, venganza, celos, resentimiento, culpa. Son sentimientos cotidianos.
Louise Bourgeois
La no violencia ha de ser la única bandera de combate entre los ejércitos humanos. Ella prevalecerá.
Mahatma Gandhi
Quiero grabar tu cara, tus gestos en mi retina, para recordarlos el día que no vea.
Megan Maxwell
Su fe había naufragado en el más difícil de todos los misterios: que un Dios justo pueda crear monstruos y exigirles que vivan como hombres.
Morris West
Vaya, pues sí que viven bien los maestros. Si fuera humano me gustaría ser como él, maestro de escuela. Uno puede dormirse cuando quiere y, aun así, siguen considerándote un buen maestro. Así que no le veo yo problema a ser maestro y gato a la vez.
Natsume Sōseki
En tres partes se divide el alma humana: en mente, en sabiduría y en ira.
Pitágoras
Estoy aquí porque me entretengo, no solo por el dinero.
Richard Branson
Solamente aquel que no deja detrás de sí una herencia de afectos sentirá escasa alegría en su sepulcro.
Ugo Foscolo
¡Un caballo! ¡Un caballo! ¡Mi reino por un caballo!
William Shakespeare