Imágenes
A menudo, cuando, acostado, me encuentro pensativo, brillan resplandores que iluminan mi ojo interior - bendita gracia de la soledad -, y entonces mi corazón se llena de placer y danza al compás de los narcisos.
William Wordsworth
El agua se ondeaba, pero ellas mostraban una más viva alegría. ¿Cómo, si no feliz, será un poeta en tan clara y gozosa compañía?
Más vale no haber oído nunca los nombres de afán y de justa ambición, que vivir desconcertado e inquieto por un espíritu que, a cada paso, se vuelve atrás para considerar su obra; luego vuelve a cobrar ánimos para seguir, y nuevamente siente que algún vano pensamiento pende amenazador, como un veto, sobre sus esperanzas.
¡No permanezcas a mis ruegos muda! Que estoy más desolado que, en su nido, el ave a la que cubre blanca nieve.
Mientras dura, un pequeño servicio es un verdadero servicio.
¡Amada libertad! ¿Y de qué sirve si no es don que consagra la alegría?
La buena poesía fluye espontáneamente de los potentes sentimientos, y trae su origen de una emoción engendrada en la calma.
Unos cuantos fuertes instintos y unas pocas reglas sencillas.
El impulso que sale del alma del bosque en primavera, puede enseñarte más cosas del hombre, del bien y del mal, que toda la sabiduría de nuestros sabios.
Todo gran escritor original debe, en la medida de su importancia y originalidad, crear o imponer el gusto literario con el cual sus escritos han de ser saboreados.
No deja de sentirse en el alma turbada tu benigna influencia; y tal vez en la entraña marmórea de la tierra, donde sufren tormento espíritus que lloran gracia y bondad perdidas, tus murmullos apagan su angustia ya los tuyos mezclan sus dulces cantos.
Nuestros años bulliciosos parecen un momento en el seno del silencio eterno.
La poesía es el aliento y el más sutil espíritu de todos los conocimientos; es la vehemente expresión del aspecto de toda la ciencia.
La tierra y el mar se entregan a la felicidad, y a mediados de mayo cada animal se siente alegre. ¡Tú, hijo de esa alegría, grita a mi alrededor, quiero oírte gritar, oh, pastor feliz!
¿Qué hogar me acogerá? ¿Entre qué valles tendré mi puerto? ¿Bajo qué arboleda construiré mi morada? ¿Qué hondo río me dará la canción de su murmullo? La tierra está ante mí. Con corazón alegre y sin temer la libertad.
La mente que se afana en construir para la eternidad se afianza en el suelo firme de la Naturaleza..
Vivimos de admiración, esperanza y amor.
No era ficción de tiempos remotos: una piedra de azul celeste, al fondo del barranco sin sol, muestra aún claramente las pisadas que los pequeños elfos, en la escena pulida dejaron, al danzar con brillante cortejo.
Respetamos la estructura corpórea del hombre, porque es la morada no sólo de un ente racional, sino de un almainmortal.
Los buenos mueren los primeros, y aquellos cuyo corazón es tan seco como el polvo estival, arden y se consumen hasta la raíz.
¡Oh ruiseñor! Tú eres de ardiente corazón: tus notas nos penetran, nos penetran, tumultuosa, indómita armonía. Cantas como si el dios del vino te dictara un mensaje de sátira amorosa: una canción de burla y de desprecio a la sombra, al rocío y a la noche callada y a la ventura firme y a todos los amores que descansan en esos tranquilos bosquecillos.
Solo juzga bien aquel que pesa y compara, y cuando su voz ha de pronunciar la sentencia mas dura, no abandona la caridad.
Nutre mi alma en libertad y puros pensamientos: sea entonces tu amor mi guía, alivio y esperanza.