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Quien no es más que justo es duro.
Voltaire
También la desesperación ha ganado muchas batallas.
Un día todo irá bien: he aquí nuestra esperanza. Todo va bien hoy: he aquí la ilusión.
Todo marcha inmejorablemente en el mejor de los mundos posibles.
Un falsa ciencia hace ateos; una verdadera ciencia prosterna al hombre ante la divinidad.
A los vivos se les debe respeto; a los muertos, nada más que verdad.
La vida es un círculo de dolores.
He visto a mucha gente muy inferior a mí, y he visto también a otros muy por encima de mí. Pero jamás he visto a nadie que no tuviera más deseos que necesidades, y más necesidades que satisfacciones.
El castigo de los criminales debe ser compulsorio; cuando a un hombre lo ahorcan no sirve para nada.
(Los judíos) Se cortan el prepucio en honor de Dios, cosa muy consecuente. Los hotentotes son más devotos: se cortan un cojón.
El divorcio probablemente se remonta a la misma época que el matrimonio. Yo creo, sin embargo, que el matrimonio es algunas semanas más antiguo.
Es mejor exponerse a absolver a un hombre culpable que condenar a un inocente.
Aquel que es demasiado pequeño tiene un orgullo grande.
Todo amor que no sea una pasión furiosa y trágica debe ser erradicado del teatro; y un amor, sea cual fuere, estaría tan desplazado en Electra como en Athalie. Vos habéis reformado la declamación; ha llegado la hora de reformar la tragedia y de purgarla de amoríos insípidos lo mismo que se ha purgado el escenario de petimetres.
La esperanza es una virtud cristiana que consiste en despreciar todas las miserables cosas de este mundo en espera de disfrutar, en un país desconocido, deleites ignorados que los curas nos prometen a cambio de nuestro dinero.
Un mérito de la poesía que pocas personas negarán: dice más y en menos palabras que la prosa.
Cuando se ha perdido todo, cuando ya no se tiene esperanza, la vida es una calamidad y la muerte es un deber.
La amistad es el casamiento del alma.
La envidia daña al mismo envidioso.
Una colección de pensamientos debe ser una farmacia donde se encuentra remedio a todos los males.
Los males llegan volando y se alejan renqueando.
Es increíble y vergonzoso que ni predicadores ni moralistas eleven más su voz contra los abusos hacia los animales.
El orgullo de los mediocres consiste en hablar siempre de sí mismos; el orgullo de los grandes hombres en no hablar nunca de ellos.
Los periódicos son los archivos de las bagatelas.
Comprenderéis sin esfuerzo que es absurdo mantener, por medio de delatores y verdugos, la religión de un Dios al que los verdugos hicieron perecer. Es casi tan contradictorio como acaparar los tesoros de los pueblos y de los reyes en nombre de ese mismo Dios que nació y vivió en la pobreza.
Debemos distinguir entre hablar para engañar, y callar para mantener reserva.
Decimos una tontería y a fuerza de repetirla acabamos creyéndola.
La parte más filosófica de las historia es hacer conocer las tonterías cometidas por los hombres.
La incertidumbre es una posición incómoda. Pero la certeza es una posición absurda.
No vivimos más que dos días; no vale pues la pena pasarlos arrastrándose ante despreciables bribones.
Si hubiera habido censura de prensa en Roma no tendríamos hoy ni a Horacio ni a Juvenal, ni los escritos filosóficos de Cicerón.
No es suficiente conquistar, se debe aprender a seducir.
La ignorancia afirma o niega rotundamente; la ciencia duda.
La más feliz de todas las vidas es una soledad atareada.
Sólo es posible afirmar en geometría.
Si Dios no existiera, sería necesario inventarlo.
El arte de la medicina consiste en mantener al paciente en buen estado de ánimo mientras la naturaleza le va curando.
Yo no estoy de acuerdo con lo que usted dice, pero me pelearía para que usted pudiera decirlo.
El hombre, nos lo han dicho muchas veces, es. Un oscuro enigma; pero ¿en qué lo es más que el resto de la naturaleza?
¡Qué cosa más pesada es llevar un nombre que se ha vuelto famoso!