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Así que quien desee la paz, que prepare la guerra.
Vegecio
Si quieres la paz, prepárate para la guerra.
La victoria en la guerra no depende completamente del número o del simple valor; sólo la destreza y la disciplina la asegurarán. Hallaremos que los romanos debieron la conquista del mundo a ninguna otra causa que el continuo entrenamiento militar, la exacta observancia de la disciplina en sus campamentos y el perseverante cultivo de las otras artes de la guerra.
Pocos hombres nacen siendo valientes, muchos se hacen mediante el entrenamiento y la fuerza de la disciplina.
Una emboscada si es descubierta y propiamente contrarrestada, pagará y con intereses el mal pretendido.