Imágenes
La suspicacia es, en el mejor de los casos, la virtud de un cobarde.
Thomas Otway
¡Oh mujer! ¡Mujer adorable! La Naturaleza te creó para dulcificar al hombre. Sin ti, hubiéramos seguido siendo bestias.
Los hombres honrados son como un blando almohadón sobre el que descansan y medran los pícaros.
Una venganza valiente nunca llega demasiado tarde.
Cuando un hombre habla de amor, escúchale con cautela; mas si te jura, ciertamente trata de engañarte.