Imágenes
Muchas veces basta una palabra, una mirada, un gesto para llenar el corazón del que amamos.
Teresa de Calcuta
La vida es un deber cumplelo.
El fruto del silencio es la oración. El fruto de la oración es la fe. El fruto de la fe es el amor. El fruto del amor es el servicio. El fruto del servicio es la paz.
Nosotros predicamos un Dios bueno, comprensivo, generoso y compasivo. Pero, ¿lo predicamos también a través de nuestras actitudes? Si queremos ser coherentes con lo que decimos, todos deben poder ver esa bondad, ese perdón y esa comprensión en nosotros.
Por favor, no maten al niño; nosotros nos ocuparemos de él... Por favor, dadme a vuestros niños. Con mucho gusto acepto todos los niños que morirían a causa del aborto.
No deis sólo lo superfluo, dad vuestro corazón.
La vida es un juego; participa en él. La vida es demasiado preciosa; no la destruyas.
Para que el amor sea verdadero, nos debe costar. Nos debe doler. Nos debe vaciar de nosotros mismos.
El mayor mal es la falta de amor y caridad, la terrible indiferencia hacia nuestro vecino que vive al lado de la calle, asaltado por la explotación, corrupción, pobreza y enfermedad.
Si no tenemos paz en el mundo, es porque hemos olvidado que nos pertenecemos el uno al otro, que ese hombre, esa mujer, esa criatura, es mi hermano o mi hermana.
No puedo parar de trabajar. Tendré toda la eternidad para descansar.
La vida es felicidad, merécela.
Amo a todas las religiones, pero estoy enamorada de la mía.
La vida es una tragedia, domínala.
La vida es himno, cántalo.
Hago mi trabajo con Jesús, lo hago por Jesús, lo hago para Jesús y, por tanto, los resultados son de Él, no míos.