Frases de Samuel Smiles

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El estudio, asesoramiento y ejemplo nunca podrán enseñar tanto como enseña un fracaso.

Quienes más labor tienen ante si y quieren trabajar, hallarán más tiempo para sus propósitos.

Esperanza... Es una compañera poderosa, y la madre del éxito.

La riqueza perdida, se puede sustituir por trabajo, la pérdida de conocimiento por estudio, la pérdida de la salud por la templanza o la medicina, pero el tiempo perdido se ha ido para siempre.

El matrimonio debe ser como el gobierno de un Estado: una serie de acomodamientos.

Quien se esfuerce en cumplir con su deber en conciencia, está llenando ya el fin para que ha sido creado y pone en sí los principios de un carácter viril.

No es el mayor esclavo aquel que está dominado por un tirano, por grande que sea ese mal, sino aquel que sirve de juguete a su propia ignorancia, al egoísmo y al vicio.

La razón por la que tan poco se logra es generalmente porque se intentó poco.

Aquellos que tienen más quehacer y están dispuestos a trabajar, son los que disponen de más tiempo.

La esperanza es como el sol, a medida que nos acercamos, arroja la sombra de nuestra carga detrás de nosotros.

Nuestros deseos, con frecuencia, son precursores de las cosas que somos capaces de hacer.

La alegría ha sido llamada el buen tiempo del corazón.

No hay leyes, por rigurosas que sean, que puedan hacer del perezoso un hombre laborioso, del prodigo un previsor o del borracho un abstemio.

El camino más corto para hacer muchas cosas es hacer solamente una cosa a la vez.

La sabiduría práctica se aprende en la escuela de la experiencia.

Quien nunca cometió un error nunca hizo un descubrimiento.

Los pequeños hechos revelan mejor que los grandes el carácter de una persona.

El entusiasmo... El poder de todas las grandes acciones.

El que nunca cometió un error, probablemente nunca haya descubierto nada.

La puntualidad es la cortesía delos reyes, decía Luis XIV. Ella es asimismo el deber de los caballeros y la necesidad de los hombres de negocios.

El comercio prueba el carácter.

Más cordura nos enseñan nuestros fracasos que nuestros éxitos. A menudo descubrimos qué es lo que nos acarreará el triunfo, después de hallar lo que nos apartaría de él y me atrevo a decir que, probablemente, quien nunca cometió una equivocación, jamás hizo ningún descubrimiento.

La vida siempre será en gran medida lo que hacemos nosotros de ella.

Una voluntad enérgica es el alma de todos los caracteres. Donde ella se encuentra hay vida; donde ella no existe, únicamente hay debilidad, impotencia y desaliento.

Más sabiduría nos enseña el error que el éxito. A menudo descubrimos lo que irá bien, después de advertir qué es lo que va mal; y probablemente, aquel que nunca cometió un error, no realizará nunca ningún descubrimiento.

Es el carácter una de las fuerzas motrices más grandes que existen en el mundo, y en sus rasgos más nobles representa la naturaleza humana en toda su grandeza, porque nos muestra al hombre en su aspecto más favorable.

Los que tienen mucho que hacer y quieren trabajar, hallarán mucho tiempo.

La vida tiene su lado sombrío y su lado brillante; de nosotros depende elegir el que más nos plazca.

Cinco céntimos en el bolsillo valen más que un amigo en la corte.

El éxito resulta de la lucha contra los obstáculos. Sin obstáculos no hay verdadero éxito. En la necesidad del esfuerzo hallamos la fuente principal del progreso de las naciones y de los individuos.

El espíritu de autoayuda es la raíz de todo crecimiento auténtico en el individuo, y, expuesto en la vida de muchos, constituye la verdadera fuente de energía y fuerza.

Los hombres que han llegado a hacerse célebres y que han influido poderosamente en los destinos de su país, han sido todos grandes trabajadores.

El respeto a sí mismo es el indumento más noble y el sentimiento más elevado que pueda caber en el ánimo humano.

Los hombres grandes y buenos no mueren ni aun en este mundo. Embalsamados en libros, sus espíritus perdurarán. El libro es una voz viviente. Es una inteligencia que nos habla y que escuchamos.

Sin dificultades no habría ningún éxito.

Los hombres que están decididos a encontrar su camino, siempre encontraran oportunidades y sino las crearán.

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Dominique de Villepin Henry Mayhew Rodolphe Töpffer Arthur Young Andy Warhol Adrian Newey Ramón Núñez Centella Al-Farabi Martín de Roa Anna Paquin