Imágenes
En las selvas les cantan las cigarras y en el azul les miran las estrellas..
Rubén Darío
Las nobles espadas de tiempos gloriosos desde sus panoplias saludan las nuevas coronas y lauros.
Ser y no saber nada, y ser sin rumbo cierto, y el temor de haber sido, y el futuro terror... y el espanto seguro de estar mañana muerto, y sufrir por la vida y por la sombra y por lo que no conocemos y apenas sospechamos.
Es la tarde gris y triste. Viste el mar de terciopelo y el cielo profundo viste de duelo.
La virtud está en ser tranquilo y fuerte; con el fuego interior todo se abrasa.
Pero tu carne es pan, tu sangre es vino.
Este axioma a todas horas habrás de meditar, la ciencia de vivir es el arte de amar.
Pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo, ni mayor pesadumbre que la vida consciente.
El libro es fuerza, es valor, es fuerza, es alimento; antorcha del pensamiento y manantial del amor.
Y en este titubeo de aliento y agonía, cargo lleno de penas lo que apenas soporto. ¿No oyes caer las gotas de mi melancolía?.
El canto vuela, con sus alas: armonía y eternidad.
¡Dejad al huracán mover mi corazón!.
Ser sincero es ser potente: de desnuda que está, brilla la estrella.
Y cuando la montaña de la vida nos sea dura y larga y alta y llena de abismos, amar la inmensidad que es de amor encendida ¡y arder en la fusión de nuestros pechos mismos!.
Juventud, divino tesoro, ¡ya te vas para no volver! Cuando quiero llorar, no lloro, y a veces lloro sin querer...
La América Española como la España entera fija está en el Oriente de su fatal destino; yo interrogo a la Esfinge que el porvenir espera con la interrogación de tu cuello divino. ¿Seremos entregados a los bárbaros fieros? ¿Tantos millones de hombres hablaremos inglés? ¿Ya no hay nobles hidalgos ni bravos caballeros? ¿Callaremos ahora para llorar después?
Un buen libro es el mejor de los amigos, lo mismo hoy que siempre.
Ama tu ritmo y rima tus acciones; bajo su ley, así como tus versos; eres un universo de universos, y tu alma, una fuente de canciones.
En nosotros, la vida vierte fuerza y calor. ¡Vamos al reino de la Muerte por el camino del Amor!
Aborreced las bocas que predicen desgracias eternas.
Manos callosas manos honrosas.
Hagamos, porque es bello, el bien...
Si pequeña es la Patria, uno grande la sueña.
La vida es misterio; la luz ciega y la verdad inaccesible asombra.
El eterno femenino puede tornar humano lo divino.
Ir al sol por la escala luminosa de un rayo...
Dichoso el árbol que es apenas sensitivo, y más la piedra dura, porque ésta ya no siente, pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo, ni mayor pesadumbre que la vida consciente.
Pues si te empeñas en soñar te empeñas en aventar la llama de tu vida.
Sin la mujer, la vida es pura prosa.
Eres un universo de universos y tu alma una fuente de canciones.
La torre de marfil tentó mi anhelo; quise encerrarme dentro de mí mismo, y tuve hambre de espacio y sed de cielo desde las sombras de mi propio abismo.
No dejes apagar el entusiasmo, virtud tan valiosa como necesaria; trabaja, aspira, tiende siempre hacia la altura.
Entre sus cejas vivas vi brillar una estrella. El cielo estaba azul, y yo estaba desnudo.
La mujer musa es la de carne y hueso.
¿Es ley que tu vivas de horror y de muerte?
Cuando quiero llorar, no lloro... y a veces lloro sin querer.
Para qué querré yo la vida cuando no tenga juventud.