Imágenes
Nunca quisimos decir nada que implicara una reflexión profunda. Queríamos que la gente se olvidara de sus problemas y se relajara porque muchos de nosotros volteamos a cierto periodo o a cierta canción... Y algo en tu vida se asocia con la música, no necesariamente la de los Rolling Stones, pero cuando eso pasa nos alegra hacer felices a las personas.
Ron Wood
Algunas veces, pinto a la música. La pintura inspira mi música.
Las actividades artísticas eran la parte más divertida de la escuela. Hacíamos action paintings, por ejemplo, conduciendo bicicletas sobre lienzos. La primera vez que lo hicimos todo el mundo se reía, pero cuando vi el resultado me dije: Espera un momento... Aquí está pasando algo. Me estaban explicando una nueva forma de expresión.
Ayer me preguntaron qué cambiaría y dije que nada, porque es una aventura que continúa y jamás pensé lo haré y luego en algún momento me detendré. Nada de eso. Fue más bien algo como esto es lo que haré y eso es lo que sigo haciendo.
Todos en la familia tocaban música. Hasta el mismísimo día de su muerte, mi padre nunca fue a ningún sitio sin su armónica en el bolsillo.
El alcoholismo lo llevo en la sangre. En los genes. Mis padres eran alcohólicos. He luchado toda mi vida contra esta adicción. Apenas ha habido algún concierto con los Rolling Stones en el que no saliera borracho al escenario. Es muy difícil romper con esos hábitos, pero espero haberlo conseguido esta vez.
He vivido la mayor parte de mi vida en una cárcel de oro, así es como se siente uno cuando está de gira con los Rolling Stones. Tenemos todos los privilegios asociados a la fama, pero desde dentro se ve como un lugar de muros muy altos.
La música, el arte, el teatro, el humor y las chicas eran lo que convertía la vida de mis hermanos en algo tan atractivo para mí. Eso era lo que yo quería hacer, y además a lo grande, así que puse todo mi empeño en aprender a tocar todos los instrumentos que los amigos de mis hermanos llevaban a las fiestas.
Llamaron a la puerta y miré por la ventana. Vi que estaba lleno de enanos, todos con los mismos trajes. Resulta que eran policías pero yo no me di cuenta. Parecían personas pequeñas vestidas de azul oscuro y con cascos brillantes. Les dije que entraran, que hacía frío fuera.
Las imágenes más vívidas que tengo de mi infancia son todas felices. Son imágenes de fiestas, montones y montones de fiestas, y de música sonando constantemente por todas partes.