Imágenes
Gente enferma de poder a la que deberíamos prohibirle olvidar que estamos acá porque nos puso Dios.
Ricardo Montaner
La música que se aprende no tiene nada que ver con la que se lleva adentro.
Le temo al tiempo porque nada lo detiene. Uno de los grandes temores que yo he tenido toda mi vida es no tener el tiempo suficiente para hacer todo lo que mi corazón quiere.
A esta altura de mi vida, me gustaría que la gente también me reconociera por mi poesía. Aunque escribo solo imágenes aisladas o cartas, que en todo caso son desahogos, desearía que con el tiempo se convirtieran en el saldo de mi vida profesional.
Siento que sueno más para el hombre que para la mujer misma. Canto para darle frases y alternativas al hombre que intenta enamorar a su pareja. Creo que cuando las mujeres oyen lo que escribo precisamente no piensan en mí como cantante, sino en lo que les gustaría escuchar de la voz de la persona que aman.
Amor es una evolución, es una transformación continua, es una búsqueda inteligente de no aburrir, una búsqueda de un día diferente todos los días.
Soy un tipo exitoso porque estoy feliz.
Las tonterías más grandes pueden dejarte grandes cicatrices en tu vida.
Creo que el principal escalón de mi vida profesional no lo he subido todavía.
Mi motivación más importante es no solamente el amor que he vivido, si no que el amor que vivo y que me toca por vivir todavía.
El tema del amor es inherente a la humanidad y ni el SIDA, ni la droga pueden llegar a alterar ese sentimiento. Por encima de lo que se ve, esta emoción tan reconfortable que se siente entre dos personas, se percibe, incluso en el aire.
Lo más preciado que conservo a lo largo de todos estos años es la experiencia de saberme querido y vigente. La única causa para que esto suceda es que Dios está ahí conmigo todo el tiempo, ayudándome, avivándome, manteniéndome con la llama encendida para que siga haciendo todo con vitalidad y con mucha alegría.
En mi vida personal, el amor es lo que me mantiene en equilibrio. Y, si yo no fuera feliz no podría transmitir lo que creo es la esencia de mi trabajo. El saber que todo esta en orden me permite seguir adelante.
La gente piensa que quien debe declararse en el amor es el hombre, pero es tan bonito también oír una declaración de amor de una mujer.
Hay que estimar a la pareja, admirarla y hacerle resaltar que tiene muchas virtudes, que la virtud más grande es haber logrado la atención absoluta e infinita de parte de uno.
Yo transcribo lo que la gente habla a diario, no necesito vivirlo para poder escribir.
A los 14 años iba por los hospitales a tocar guitarra para los niñitos, me metí en un instituto de Maracaibo para niños con síndrome de Down. A las 4:30 de la tarde llegaba con mi guitarra y me pasaba horas cantándoles. Por ese lado Dios me fue encaminando hacia la sensibilidad por el prójimo.
No vale de nada tener todo cuando al final no tienes nada. Se puede tener todo y a la vez no tener nada.