Imágenes
Cuando el genio apunta a la Luna, el tonto se queda mirando al dedo.
Proverbio Chino
Le pedí a Dios todo para gozar la vida, Él me dio vida para gozarlo todo.
El sabio puede sentarse en un hormiguero, pero sólo el necio se queda sentado en él.
No puedes guiar el viento, pero puedes cambiar la dirección de tus velas.
No se puede caminar contemplando las estrellas cuando se tiene una piedra en el zapato.
Incluso las torres más altas empiezan en el suelo.
Cuando el dinero habla, la verdad calla.
Un pájaro no canta porque tenga una respuesta. Canta porque tiene una canción.
Si quieres agrandar los campos de la felicidad, comienza por nivelar tu corazón.
Disfruta solo los placeres del momento.
Cuando llegues a la última página, cierra el libro.
No prometas nada cuando te sientas eufórico; no respondas una carta cuando te sientas iracundo.
Las buenas fuentes se conocen en las grandes sequías; los buenos amigos, en las épocas desgraciadas.
A los largos sentimientos, largas consecuencias.
El que ve el cielo en el agua ve los peces en los árboles.
El sabio no dice lo que sabe, y el necio no sabe lo que dice.
El que ha desplazado la montaña es el que comenzó por quitar las pequeñas piedras.
El corazón jamás habla, pero hay que escucharlo para entender.
Excava el pozo antes de que tengas sed.
Nunca se pierden los años que se quita una mujer; van a parar siempre a cualquiera de sus amigas.
Ama más a tus amigos cuando menos lo merezcan, por que es cuando más lo necesitan.
Es más fácil doblar el cuerpo que la voluntad.
No puedes evitar que el pájaro de la tristeza vuele sobre tu cabeza, pero sí puedes evitar que anide en tu cabellera.
El jade necesita ser tallado para ser una gema.
En la naturaleza, no hay castigos ni premios, sólo consecuencias.
Si haces planes para un año, siembra arroz. Si los haces para dos lustros, planta árboles. Si los haces para toda la vida, educa a una persona.
Es fácil esquivar la lanza, mas no el puñal oculto.
El bien que hicimos en la víspera es el que nos trae la felicidad por la mañana...
El amor no se mendiga, se merece.
La montaña es pesada, pero una mariposa levanta a un gato en el aire.
Si me das pescado, comeré hoy; si me enseñas a pescar, podré comer mañana.
Cuando te inunde una enorme alegría, no prometas nada a nadie. Cuando te domine un gran enojo, no contestes ninguna carta.
Quien pisa con suavidad va lejos.
No hay que ser fuerte; hay que ser sensible.
Una simple chispa puede iniciar un fuego que arrase la pradera.
Cuando Dios desea enviar un desastre sobre una persona, primero le envía un poco de suerte para que goce y ve si puede recibirla de una manera decorosa. Cuando Dios desea enviar bendiciones sobre una persona, primero le envía un poco de desventuras para ver cómo puede soportarlas.
Si el alumno no supera al maestro, ni es bueno el alumno, ni es bueno el maestro.
Las grandes almas tienen voluntades; las débiles tan solo deseos.
Si un problema tiene solución, no hace falta preocuparse. Si no tiene solución, preocuparse no sirve de nada.
Más vale una cucharada de suerte que un barril de sabiduría.