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Si quieres que algo se haga, encárgaselo a una persona ocupada.
Proverbio Chino
La tinta más pobre de color vale más que la mejor memoria.
El perro en la perrera se rasca las pulgas; el perro que caza no las siente.
Se puede dormir en la misma cama sin tener los mismos sueños.
La medicina sólo puede curar las enfermedades curables.
Busca una luz en lugar de estar maldiciendo eternamente la oscuridad.
Si te sientas en el camino, ponte de frente a lo que aun has de andar y de espaldas a lo ya andado.
Morir sin perecer, es presencia eterna.
La lengua resiste porque es blanda; los dientes se quiebran porque son duros.
Nada falta en los funerales de los ricos, salvo alguien que sienta su muerte.
Es más fácil saber como se hace una cosa que hacerla.
No temas de ser lento, teme solo a detenerte.
Es más fácil variar el curso de un río que el carácter de un hombre.
No confundas, jinete, el galopar del caballo con los latidos de tu propio corazón.
La tontería se sitúa siempre en primera fila para ser vista. La inteligencia, por el contrario, se sitúa detrás para observar.
Las bendiciones nunca vienen en pares, y los infortunios nunca vienen solos.
No desesperes: de las nubes más negras cae un agua que es limpia y fecunda.
El hombre que no sabe sonreír no debe abrir la tienda.
Aquel que pregunta es un tonto por cinco minutos, pero el que no pregunta permanece tonto por siempre.
El trabajo del pensamiento se parece a la perforación de un pozo: el agua es turbia al principio, más luego se clarifica.
Hay que subir la montaña como viejo para llegar como joven.
Quien hace una pregunta es ignorante cinco minutos; quien no la hace será siempre ignorante.
El que comete un mal y tiene temor de que se sepa, posee todavía una semilla de bueno dentro de su maldad; pero el que hace un bien y está ansioso de que se enteren, tiene todavía una raíz de mal en su bondad.
El que se pone de puntillas no puede sostenerse derecho.
No puedes impedir que las aves de la tristeza vuelen hacia ti, pero puedes impedir que aniden en tus cabellos.
Disfruta la vida, es más tarde de lo que crees.
Pregunta lo que no sepas y pasarás por tonto unos minutos; no lo preguntes, y serás tonto la vida entera.
La gente se arregla todos los días el cabello, ¿por qué no el corazón?.
Más difícil que abrir una tienda para comerciar es mantenerla abierta.
El que hace el bien de los demás hace el suyo.
El árbol más fuerte y frondoso vive de lo que tiene debajo.
No satisfagáis jamás hasta la saciedad vuestros deseos; así os proporcionaréis placeres nuevos.
Nunca mates una mosca sobre la cabeza de un tigre.
El dragón inmóvil en las aguas profundas se convierte en presa de los cangrejos.
A perro colimbo, sartenazo en los hocicos.
Al comer retoños de bambú, recuerda al hombre que los plantó.
Todos los hombres son sabios; unos antes, los otros, después.
No coloques el puchero en el fuego si el ciervo aún corre en el bosque.
Si el cuerpo es derecho no importa que la sombra sea torcida.
Nadie se baña dos veces en el mismo río, pues siempre es otro río y otra persona.