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No hay libro tan malo del que no se pueda aprender algo bueno.
Plinio
Nullum esse librum tam malum ut non áliqua parte prodesset.
El hábito es el maestro más eficaz.
La envidia y aún la apariencia de la envidia es una pasión que implica inferioridad dondequiera que ella se encuentre.
No hay mortal que sea cuerdo a todas horas.
El día más largo llega pronto a su fin.
El miedo es mal maestro para dar lecciones de virtud.
Cuanto más felices son los tiempos más pronto pasan.
No hay libro tan malo que no sirva para algo.
No hay autoridad como la que se funda en la justicia y se ejerce por la virtud.
La guerra es un atentado contra el género humano.
Muchas cosas se juzgan imposibles de hacer, antes de que estén hechas.
Que no pase un día sin leer o escribir por lo menos una línea.
Lo que no podemos alcanzar, bástenos haberlo deseado.
Hogar es donde habita el corazón.
Ningún mortal es sabio todo el tiempo.
La verdadera gloria consiste en hacer lo que merece escribirse y en escribir lo que merece leerse.
Entre las miserias de nuestra vida en la tierra, el suicidio constituye el más preciado don que Dios ha concedido al hombre.
Por naturaleza, los hombres gustan de ver cosas nuevas y de viajar.
El primer favor denegado anula todos los anteriores.
Leed mucho, pero no muchas cosas.
El mayor número de los males que afectan al hombre provienen del hombre mismo.
Lo mejor que la naturaleza ha dado al hombre es la brevedad de su vida.
Disminuye el deseo de todas las cosas cuando la ocasión es demasiado fácil.
El último día coloca a cada hombre en la misma situación que estaba antes de nacer.
Servid cien veces, negaos una, y nadie se acordará más que de vuestra negativa.
La práctica es un maestro excepcional.
No pareces haber vencido por triunfar, sino triunfar por haber vencido.
Muchas cosas se reputan imposibles antes de haberse realizado.
Es difícil retener lo aprendido, a menos que lo practiques.
No hay libro por malo que sea, que no tenga algo bueno.
Yo converso solamente conmigo mismo y con mis libros.
Vivir es velar.
Si cuentas los años, el tiempo te parecerá breve; si ponderas los acontecimientos, te parecerá un siglo.