Imágenes
La amistad es una igualdad armoniosa.
Pitágoras
No digas pocas cosas en muchas palabras, sino muchas cosas en pocas palabras.
No dejes que tu cuerpo sea la tumba de tu alma.
Alimenta un gallo, pero no lo sacrifiques, pues está consagrado a la Luna y al Sol.
No te envanezca ser amado mucho por una mujer a quien profesas ardiente amor.
Si se os pregunta: '¿qué es la muerte?', responded: 'la verdadera muerte es la ignorancia'. ¡Cuántos muertos entre los vivos!
Hay un principio bueno, que ha creado el orden, la luz y el hombre, y un principio malo, que ha creado el caos, las tinieblas y la mujer.
Sé bueno al igual que los que fueron buenos contigo.
El orden es el más hermoso ornamento de una casa.
Mide tus deseos, sopesa tus opiniones, cuenta tus palabras.
Si y no son las palabras más antiguas y simples, pero que requieren más reflexión.
El alma es un acorde; la disonancia, su enfermedad.
Perdona a tu hijo si confiesa su falta, también si la oculta; pero no si la niega.
Mientras los hombres sigan masacrando a sus hermanos los animales, reinará en la tierra la guerra y el sufrimiento y se matarán unos a otros, pues aquel que siembra dolor y la muerte no podrá cosechar ni la alegría, ni la paz, ni el amor.
Si quieres vivir mucho, guarda un poco de vino rancio y un amigo viejo.
Una tonelada de ciencia no vale más que una gota de sabiduría.
Abstente de los seres vivos...
Nunca mojes tu pan en la sangre de los animales ni en las lágrimas de tus semejantes.
Si tienes una pena del corazón no la toques. Contra dolores del alma sólo hay dos medicamentos: la esperanza y la paciencia.
No pases nunca por encima de un yugo.
No te dejes poseer por una risa incontenible.
Sobre todas las cosas pueden hacerse dos afirmaciones totalmente contrarias.
Al calzarte comienza por el pie derecho, y al levantarte, por el izquierdo.
Escoge la mejor manera de vivir; la costumbre te la hará agradable.
El hilo de la vida se aflojaría si no fuera mojado con algunas lágrimas.
Escribe en la arena las faltas de tu amigo.
Ayuda a tus semejantes a levantar su carga, pero no te consideres obligado a llevársela.
Más le vale a un hombre tener la boca cerrada, y que los demás le crean tonto, que abrirla y que los demás se convenzan de que lo es.
Dos especies de lágrimas tienen los ojos de la mujer: de verdadero dolor y de despecho.
No creas nada extraño sobre los dioses o las creencias religiosas.
No seas ambicioso y tacaño; la justa medida es excelente en tales casos.
Dejemos el pesimismo para tiempos mejores.
Con orden y tiempo se encuentra el secreto de hacerlo todo, y de hacerlo bien.
Si sufres injusticias, consuélate, porque la verdadera desgracia es cometerlas.
Prefiero contraer el hábito de hablar tan prudentemente como se escribe, que escribir tan veloz como se habla.
No te cortes las uñas durante un sacrificio.
Escucha, serás sabio. El comienzo de la sabiduría es el silencio.
Resuélvete a seguir la conducta más excelente y por costumbre te deleitarás con ella.
No revuelvas el fuego con un cuchillo...
Cuando estés fuera de casa, no vuelvas nunca la vista atrás, pues las erinias siguen tus pasos.