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Nosotros somos de un sitio, de un país llamado Cataluña, ahí arriba, y estamos allí. Nosotros pintamos poco en todo esto.
Pep Guardiola
¿Yo gané cuatro clásicos como entrenador? No, nosotros los ganamos.
Si nos levantamos bien temprano y curramos, somos un país imparable.
Ciudadanos de Cataluña, ¡ya la tenemos aquí!
Soy incapaz de planear algo a más tiempo de medio año o un año. Me canso. Me es imposible.
Con cinco millones de parados, para qué hablar de árbitros.
Hace exactamente dos años, estábamos a doce puntos del Real Madrid y luego tuvimos que ganar 2-6 en el Bernabéu para ser campeones. Si no hubiésemos ganado allí, el Madrid nos hubiese ganado la Liga.
Sólo se nos recordará si ganamos, si no ganamos, todo esto quedará como una anécdota.
A Mascherano y Keita no me los quitéis porque son mis niñitas. Son dos soles. Mascherano es el capitán de Argentina. Son dos jugadores impagables. Da sentido a la profesión de entrenador el tener jugadores como estos.
Hay muchas maneras de plantear los partidos, pero no he conocido nunca a un equipo que no vaya a ganar.
Tenemos que ser audaces, salir al campo y hacer las cosas, no sentarnos y esperar a que suceda. Tenemos que demostrar lo que podemos hacer y que merecemos ganar el título. Tenemos que ser valientes y salir a jugar.
Le daría 50 años de contrato a Pep Guardiola.
Mourinho es extraordinario, pero Guardiola es el mejor.
Eres bueno y sabes que eres bueno. Entra. Yo soy un gran defensor del ser humano y creo mucho, mucho, mucho en él. Hay que correr, hay que correr, moverse, porque si no... ¡Nos están esperando en ese lado, sácala atrás y mételo al otro lado!.
Alfonso sín duda es el mejor jugador de mi generación, ninguno de nosotros es capaz de igualar su calidad.
La gran suerte que uno puede tener es hacer lo que le gusta. Dar con eso es la esencia de todo.
Pep es el Mesías: iluminó un camino y todos creyeron.
Yo no he encontrado a un futbolista, a un deportista de alto nivel, que no le guste aquello que hace.
Es muy bueno, abre espacios, no se cansa de correr y sus movimientos hacen buenos a la gente que tiene a su lado. Es un jugador muy solidario. Teniendo un padre que trabaja en una gasolinera no puede ser un mal jugador. Es, además, un sol de niño, una persona encantadora y estamos encantados de tenerle con nosotros.
Es una sensación que dura apenas un minuto, minuto y veinte segundos quizás, pero es lo que da sentido a mi profesión.
Si perdemos, continuaremos siendo el mejor equipo del mundo. Si ganamos, seremos eternos.
Vaya donde vaya lo hará bien, porque es el mejor técnico del mundo.
Un día, Valero Rivera, un buen amigo, me dijo algo que nunca he olvidado. Me comentó que el Barça nos hace buenos a todos. Vive la vida dando gracias a esta institución, me aconsejó
Sólo ganamos tres puntos, pero el cómo queda para siempre.
Cuando juega sin presión, Messi se aburre.
71 puntos son una puta barbaridad.
Yo no quiero ser ejemplo de nadie.
El secreto de este equipo son los jugadores. Les hago correr y que jueguen todos. Son muy buenos. Mucho trabajo. Cuando no corren les denuncio y como no les gusta, corren.
Si algo te agarra por los huevos lo puedes conseguir todo.
No estoy en las cabezas de los jugadores, pero sé que si ganamos damos un paso de gigante en la Liga. Yo no soy psicólogo. Soy un tío que jugó al fútbol, y sólo tengo el título de entrenador y la selectividad. Mañana nos va la Liga, ganamos tres cuartos de Liga. Ésa es motivación suficiente.
Perdonaré que no acierten, pero no que no se esfuercen.
El secreto de un buen equipo está en el orden, que todos sepan lo que hay que hacer.
Una parte de mí dice que debería seguir ligado al fútbol y otra que me aleje.
Se dice que es más fácil cambiar de mujer que de equipo de fútbol, y es cierto.
Lo más maravilloso de mi profesión es imaginar el partido que va a suceder mañana. Con los jugadores que yo tengo, con esas herramientas que tengo, con el contrario, que se lo que hace, soñar qué va a pasar.