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Hay momentos en los que Dios exige obediencia, pero hay momentos en los que desea probar nuestra voluntad y nos desafía a entender su amor.
Paulo Coelho
Pero ¿las oraciones no nos acercan a Dios? - Te respondo con otra pregunta. ¿Todas esas oraciones que dices harán que el sol salga mañana? Por supuesto que no: el sol nace porque obedece a una ley universal. Dios está cerca de nosotros, independientemente de las oraciones que digamos.
Es aquel que es capaz de entender el milagro de la vida, luchar hasta el final por algo en lo que cree, y entonces, escuchar las campanas que el mar hace sonar en su lecho.
El miedo a sufrir es peor que el propio sufrimiento.
El papel de alma caritativa corresponde a los que tienen miedo de tomar decisiones en la vida. Siempre es mucho más fácil creer en la propia bondad que enfrentarte a los demás y luchar por tus derechos. Siempre es más fácil escuchar una ofensa y no reaccionar que tener el coraje de enzarzarte en un combate con alguien más fuerte.
La ansiedad forma parte del amor, y no hay que culparla por ello.
Aquello que nos hiere es aquello que nos cura.
¿Qué es el éxito? Es poder irse a la cama cada noche con el alma en paz.
La vida y la muerte pierden su significado, sólo están los desafíos que son recibidos con alegría y superados con tranquilidad.
Se ama porque el Amor es el Don Supremo y no porque nos dé algo a cambio.
La felicidad es a veces una bendición, pero por lo general es una conquista.
Porque el camino es más importante que aquello que lo llevó a caminar.
No existe la tragedia, sino lo inevitable. Todo tiene su razón de ser: solo se necesita distinguir lo que es pasajero de lo que es definitivo. ¿Que es lo pasajero? Lo inevitable - ¿Y lo definitivo? Las lecciones de lo inevitable.
Las tristezas no se quedan para siempre cuando caminamos en dirección a lo que siempre deseamos.
¿Qué es la realidad? Es lo que la mayoría de la gente consideró que debía ser. No necesariamente lo mejor, ni lo más lógico, sino lo que se adaptó al deseocolectivo.
Nunca desistas de un sueño. Sólo trata de ver las señales que te lleven a él.
La posibilidad de realizar un sueño es lo que hace que la vida sea interesante.
Ahí está la Mano Superior que dice: A veces mis hijos tienen ojos y no ven. Tienen oídos y no oyen. Así, les exigiré a algunos que no sean sordos ni ciegos para mí.
El perdón sólo funciona con quien lo acepta. Yo acepté el perdón.
El fanatismo es la única salida a las dudas que no cesa de generar el alma del ser humano.
Las dunas cambian con el viento, pero el desierto sigue siendo el mismo. Así sucederá con nuestro amor.
Un guerrero de la luz está siempre vigilante. No pide permiso a los otros para empuñar su espada; simplemente la toma en sus manos. Tampoco pierde tiempo explicando sus gestos; fiel a las determinaciones de Dios, él responde por sus acciones.
Cada día el sol ilumina un mundo nuevo.
Las apuestas y los pactos se hacen con los ángeles. O con los demonios.
En algunos momentos las personas son incapaces de entender la felicidad.
La soledad no es la ausencia de compañía, sino el momento en el que nuestra alma tiene la libertad de conversar con nosotros y ayudarnos a decidir sobre nuestras vidas.
Hoy, estoy convencida de que nadie pierde a nadie, porque nadie posee a nadie.
Las personas se encuentran cuando necesitan encontrarse.
Evita a toda costa a aquellos que sólo están a tu lado en los momentos de tristeza con palabras de consuelo. Porque ésos, en realidad, se están diciendo a sí mismos: Yo soy más fuerte. Soy más sabio. Yo no habría dado ese paso.
Descubrí la Leyenda Personal y las Señales de Dios, verdades que mi raciocinio intelectual se negaba a aceptar a causa de su simplicidad.
El día que no sientas amor por la vida, tu tiro será confuso, complicado.
El juego de la seducción es algo que siempre nos despierta a la vida.
Porque las personas se fascinan con pinturas y palabras y terminan olvidando el Lenguaje del Mundo.
Solamente pasaba diez minutos con el amor de su vida, y miles de horas pensando en él.
¿Cómo juzgar en un mundo donde se intenta sobrevivir a cualquier precio, a aquellas personas que deciden morir? Nadie puede juzgar. Sólo uno sabe la dimensión de su propio sufrimiento, o de la ausencia total de sentido de su vida.
Tenemos que aprovechar cuando la suerte está de nuestro lado y hacer todo lo posible por ayudarla, de la misma manera que ella nos está ayudando.
En toda relación humana, lo más importante es hablar.
Un hombre tiene que escoger. En esto reside su fuerza: en el poder de sus decisiones.
La lealtad se puede comparar con una tienda de valiosísimos jarrones de porcelana cuya llave nos ha confiado el amor.
Conserva en tu memoria durante el resto de tus días las cosas buenas que surgieron de las dificultades.