Imágenes
En todo encuentro erótico hay un personaje invisible y siempre activo: la imaginación.
Octavio Paz
La imaginación en libertad transforma al mundo y hecha a volar las cosas.
Cada poema es único. En cada obra late, con mayor o menor grado, toda la poesía. Cada lector busca algo en el poema. Y no es insólito que lo encuentre: Ya lo llevaba dentro.
La libertad no necesita alas, lo que necesita es echar raíces.
La soledad, el sentimiento y conocimiento de que uno está solo, excluido del mundo, no es una característica exclusivamente mexicana. Todos los hombres, en algún momento de sus vidas, se sienten solos. Y lo están. Vivir es separarse de lo que fuimos para acercarnos a lo que seremos en el futuro. La soledad es el hecho más profundo de la condición humana.
Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno del miedo... del miedo al cambio.
La arquitectura es el testigo menos sobornable de la historia.
El culto a la vida es también culto a la muerte.
No hay nada más triste que el escritor sometido al dictado del político.
La mucha luz es como la mucha sombra: no deja ver la mirada interior.
El amor nace de un flechazo; la amistad del intercambio frecuente y prolongado.
El camino también desaparece mientras lo pienso, mientras lo digo. La sabiduría no está ni en la fijeza, ni en el cambio, sino en la dialéctica entre ellos. Constante ir y venir: la sabiduría está en lo instantáneo. Es el tránsito. El tránsito no es sabiduría sino un simple ir hacia... el tránsito se desvanece: sólo así es tránsito.
La poesía no se propone consolar al hombre de la muerte, sino hacerle entrever que vida y muerte son inseparables: son la totalidad.
Todo es presencia, todos los siglos son este presente.
La poesía debe ser un poco seca para que arda bien, y de este modo iluminarnos y calentarnos.
América no es tanto una tradición que continuar como un futuro que realizar.
Dios existe. Y si no existe debería existir. Existe en cada uno de nosotros, como aspiración, como necesidad y, también como último fondo, intocable de nuestro ser.
... el verdadero amor es el amor único a una persona en cuerpo y alma.
La realidad es mucho más rica y cambiante que los sistemas conceptuales que pretenden contenerla.
La indiferencia del mexicano ante la muerte se nutre de su indiferencia ante la vida.