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La historia de mi vida no alcanza ni a salir de Chicago. Aún no me ha pasado nada. Por eso voy a Nueva York.
Meg Ryan
¿Ves? Esto es tan típico de ti. Dices cosas como esa y haces que me resulte imposible odiarte. Y te odio, Harry. realmente te odio. Te odio.
Cuando me pregunten qué era lo que más me gustaba de la vida, yo responderé: tú.
Cuando Joe y yo empezamos a salir queríamos exactamente lo mismo. Queríamos vivir juntos, pero no casarnos, porque cada vez que alguna amistad se casaba, arruinaba su relación. Prácticamente nunca volvían a tener relaciones. Es verdad. Es uno de los secretos que nadie te dice jamás.
¿Cuánto peor puede ser que terminando de cenar, él se acerque, me arranque un pelo de la cabeza y lo use como hilo dental?
Lo curioso de esta forma de comunicación es que es más probablehablar de nada que de algo, pero sólo quería decir que para mí, toda esta nada ha significado más que muchos algo. Por eso, gracias.