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Para hacer el bien hay que tener el valor de sufrir y sobrellevar las contrariedades.
Juan Bosco
La falta de modestia en el hablar, indica falta de criterio.
No basta saber las cosas, es necesario practicarlas.
Aquí hacemos consistir la santidad en estar siempre alegres.
Un consejo para ser feliz: evitar el pecado y frecuentar la Santa Comunión.
Ser bueno no consiste en no cometer ninguna falta, sino en saber enmendarse.
No basta amar a los niños, es preciso que ellos se den cuenta que son amados.
Preocupáos de lo que el Señor podrá pensar de vosotros y no de aquello que, ya sea en bien, ya sea en mal, digan de vosotros los hombres.
A los niños hay que educarlos con amor, amistad y responsabilidad.
Amemos lo que aman los jóvenes.
Mi sistema se basa en la religión, la razón y el amor.
No es justo que viva de la caridad de otros quien puede bastarse a sí mismo.
No basta cargar, es necesario amar la cruz que Jesús nos pone sobre las espaldas.
Una hora de paciencia vale más que un día de ayuno.
Yo voy adelante haciendo como la locomotora, puf, puf, puf...
Olvida los favores hechos, pero no los recibidos.
La buena educación es el germen de muchas virtudes.
Un pedazo de Paraíso lo arregla todo.
El mundo está lleno de tontos y de astutos. Los astutos son los que trabajan y sufren para ganarse el cielo; los tontos son los que viven su vida sin pensar en la eternidad.
Seamos ambiciosos, pero de salvar nuestra alma con sacrificio.
¡Ánimo! Todo pasa. Ama tu trabajo y no dejes de cumplir tu deber cada día.
¡Mi mayor satisfacción es verte alegre!
La Eucaristía y la Virgen son las dos columnas que han de sostener nuestras vidas.
Nunca hay que decir 'no me toca', sino '¡Voy yo!'.
Dios favorece al hombre alegre.
Comprenderás mejor la importancia del bien, si consideras que tu salvación eterna o tu condenación, depende únicamente de ti.
El pasado debe ser maestro del futuro.
Los jóvenes no sólo deben ser amados, sino que deben notar que se les ama.
Jesús te espera en la Iglesia. ¿Por qué no lo visitas a menudo?. Sé apóstol de la Eucaristía.
Las espinas de la vida se trocarán en flores para toda la eternidad.
Respeto a todos, miedo a ninguno.
Recordad que la educación depende de la formación del corazón.
No te fíes mucho de tus propias fuerzas; puedes caer como San Pedro.
¿Quieren hacer una cosa buena? Eduquen a la juventud, ¿Quieren hacer una cosa divina? Eduquen a la juventud. Antes bien, esta, entre las cosas divinas, es divinísima.
No hay jóvenes malos, sino jóvenes mal orientados.
Dar buenos consejos a los compañeros, es una manera de hacer obras de caridad.
Por los jóvenes hemos de estar dispuestos a soportar cualquier contratiempo y fatiga.
Para trabajar con éxito, téngase caridad en el corazón y paciencia en la ejecución.
Disimula las faltas ajenas y nunca te burles de nadie.
Nos sirva de lección y de experiencia todo cuanto sucede.
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