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El vino da brillantez a las campiñas, exalta los corazones, enciende las pupilas y enseña a los pies la danza.
José Ortega y Gasset
Solemos llamar vivir a sentirnos empujados por las cosas en lugar de conducirnos con nuestra propia mano.
El vanidoso necesita de los demás, busca en ellos la confirmación de la idea que quiere tener de sí mismo.
Cualquier verdad ignorada prepara su venganza.
Saber que no se sabe constituye tal vez el más difícil y delicado saber.
La razón pura tiene que ceder su imperativo a la razón vital; la vida debe ser vital.
Una buena parte de los hombres no tienen más vida interior que la de sus palabras, y sus sentimientos se reducen a una existencia oral.
No es el hambre, sino, al contrario, la abundancia, la sobra de energías, quien suscita la guerra.
He dicho, y sigo creyendo cada día con más enérgica convicción, que la sociedad humana es aristocrática siempre, quiera o no, por su esencia misma, hasta el punto de que es sociedad en la medida en que sea aristocrática, y deja de serlo en la medida en que se desaristocratice.
El hombre selecto no es el petulante que se cree superior a los demás, sino el que se exige más que los demás, aunque no logre cumplir en su persona esas exigencias superiores.
A la república solo ha de salvarla pensar en grande, sacudirse de lo pequeño y proyectar hacia lo porvenir.
El amor, más que un poder elemental, parece un género literario. Porque el amor, más que un instinto, es una creación, y aun como creación nada primitiva en el hombre.
De querer ser a creer que se es ya, va la distancia de lo trágico o lo cómico.
El perspectivismo no entraña una concepción subjetivista de la verdad.
El río se abre un cauce y luego el cauce esclaviza al río.
El revolucionario no se revela contra los abusos, sino contra los usos.
Juzgar los hechos amargos con sesgo optimista equivale a no habernos enterado debidamente de ellos.
La poesía es hoy el álgebra superior de las metáforas.
Con la moral corregimos los errores de nuestros instintos, y con el amor los errores de nuestra moral.
Cada día me interesa menos ser juez de las cosas y voy prefiriendo ser su amante.
Cada cosa que existe es una virgen que ha de ser amada para hacerse fecunda.
El liberalismo es la suprema generosidad: Es el derecho que la mayoría otorga a la minoría aunque ese enemigo sea débil.
El pensamiento es la única cosa del Universo de la que no se puede negar su existencia: negar es pensar.
La historia del toreo está ligada a la de España, tanto que sin conocer la primera, resultará imposible comprender la segunda.
El camuflaje es, por esencia, una realidad que no es la que parece. Su aspecto oculta, en vez de declarar su sustancia. Por eso engaña a la mayor parte de las gentes. Sólo se puede librar de la equivocación que el camuflaje produce quien sepa de antemano, y en general, que el camuflaje existe.
La desventura de España es la escasez de hombres dotados de talento.
El individuo no puede orientarse en el universo sino a través de su raza, porque va sumido en ella como la gota en la nube pasajera.
La esencia del particularismo es que cada grupo deja de sentirse a sí mismo como parte, y en consecuencia deja de compartir los sentimientos de los demás.
El nacionalismo es siempre un impulso de dirección opuesta al principio nacionalizador.
La vida cobra sentido cuando se hace de ella una aspiración a no renunciar a nada.
El nihilista, no estimándose a sí mismo, sintiéndose incapaz, busca compensación aniquilando los valores del mundo.
Lo que llamamos nuestra intimidad no es sino nuestro imaginario mundo, el mundo de nuestras ideas.
La lealtad puede decirse que es el camino más corto entre dos corazones.
La juventud necesita creerse, a priori, superior. Claro que se equivoca, pero esta es precisamente el gran derecho de la juventud.
Vivir es más vivir, afán de aumentar los propios latidos. Cuando no es así, la vida está enferma y, en su medida, no es vida.
Lo que más vale en el hombre es su capacidad de insatisfacción.
Yo soy yo y mi circustancia, y si no la salvo a ella no me salvo a yo.
No sabemos lo que nos pasa y eso es precisamente lo que nos pasa.
Según se es, así se ama.
La colonización americana es lo único verdaderamente grande que ha hecho España.