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A los que les gusta mucho la plata hay que correrlos de la política. Son un peligro.
José Mujica
La economía sucia, el narcotráfico, la estafa, el fraude y la corrupción son plagas contemporáneas cobijadas por ese antivalor, ese que sostiene que somos más felices si nos enriquecemos sea como sea.
No es bonito legalizar la marihuana, pero peor es regalar gente al narco. La única adicción saludable es la del amor.
Siento rabia, me caliento, digo disparates, pero no puedo cultivar el odio. Hay que respetar, sobre todo cuando más duele.
Lo que algunos llaman la crisis ecológica del planeta es consecuencia del triunfo avasallante de la ambición humana, ese es nuestro triunfo también nuestra derrota.
Ser libre es gastar la mayor cantidad de tiempo de nuestra vida en aquello que nos gusta hacer.
No es que se pueda ser desinteresado, no hay ser viviente que sea desinteresado, hay una cuota dentro de nosotros que así nos mandata, la vida es el juego de solidaridad, de fraternidad. A la alta política le interesa ese cariño de la gente, algo que se transmite, que no tiene precio y que no se compra en el supermercado.
De qué nos vale una actitud ecologista en un rincón si el universo de la industria se mueve como se mueve?
Lo inevitable no se lloriquea. Lo inevitable hay que enfrentarlo.
Sí, es posible un mundo con una humanidad mejor. Pero tal vez hoy la primera tarea sea salvar la vida.
Vivir mejor no es sólo tener más, sino que es ser más feliz.
Estoy muy contento con el hoy, me tiene abrumado el pasado mañana.
Me gustan los Alpes y las montañas, pero no me gustan los relojes y menos los bancos.
Me comí 14 años en cana La noche que me ponían un colchón me sentía confortable, aprendí que si no puedes ser feliz con pocas cosas no vas a ser feliz con muchas cosas. La soledad de la prisión me hizo valorar muchas cosas.
Legalizando e interviniendo, se puede lograr que muchas mujeres retrocedan en su decisión, sobre todo aquellas en los sectores más humildes o quienes están solas.
No soy pobre, soy sobrio, liviano de equipaje, vivir con lo justo para que las cosas no me roben la libertad.
Entonces soy sobrio para tener tiempo, porque cuando tú compras con plata no estas comprando con plata, estas comprando con el tiempo de tu vida que tuviste que gastar para tener esa plata.
Ocupamos el templo con el dios Mercado, él nos organiza la economía, la política, los hábitos, la vida y hasta nos financia en cuotas de tarjeta la apariencia de felicidad.
El matrimonio gay es más viejo que el mundo. Tuvimos a Julio César, Alejandro el Grande. Dicen que es moderno y es más antiguo que todos nosotros. Es una realidad objetiva. Existe. No legalizarlo sería torturar a las personas inútilmente.
No quiero hablar de austeridad porque es una palabra prostituida en Europa; abogo por una manera personal de vivir con sobriedad.
Ha practicado la solidaridad como no he visto en ningún Gobierno en la historia de América Latina, por lo menos hasta donde yo puedo hacer memoria.
Vengo del sur, y como tal, cargo inequívocamente con los millones de compatriotas pobres de América Latina, patria común.
Arrasamos las selvas, las selvas verdaderas e implantamos selvas anónimas de cemento.
Así como vamos no es posible colmar ese sentido de despilfarro que tenemos.
Si tuviera muchas cosas tendría que ocuparme de ellas. La verdadera libertad está en consumir poco.
Cargo con una gigantesca deuda social y con la necesidad de defender la Amazonía, los mares, nuestros grandes ríos de América.
Me comí años en cana y dos horas después de que salí, ya estaba militando.
La cuestión de la integración no es cuestión de agrandar los mercados, sino de tener una voz potente en el mundo.
La política no es un pasatiempo, no es una profesión para vivir de ella, es una pasión con el sueño de intentar construir un futuro social mejor; a los que les gusta la plata, bien lejos de la política.
No es una pose poética, es un cálculo fríamente materialista, no esclavizar la vida por cuestiones materiales para tener el mayor margen de libertad y tiempo de la vida, para gastarlo en las cosas que a uno lo motivan. El ser sobrio es un cálculo bien premeditado, tener tiempo para ser libre y entonces no te dejes afanar la vida, no te dejes transformar en un esclavo, no te acostumbres a vivir a costillas de los otros.
La política es la lucha por la felicidad de todos.