Imágenes
La voz humana, dos minúsculas cuerdas sedosas, maravillosas, más que todo lo demás.
James Joyce
¡Qué triste y qué hermoso! Le daban ganas de llorar mansamente, pero no de llorar por él, de llorar por aquellas palabras tristes y hermosas como música.
Parece un barco fantasma. No. Espera. ¿Son árboles? Una ilusión óptica. Espejismo.
Todo un símbolo del arte irlandés. El espejo rajado de una sirvienta.
La joven vida respira sobre el cristal, el mundo que no era viene para irse, un niño duerme, un viejo se marcha, oh padre renegado, perdona a tu hijo.
¿Acaso podemos cerrar el corazón contra un afecto sentido profundamente? ¿Debemos cerrarlo?
Las máquinas es su grito, su quimera, su panacea. Aparatos que ahorran mano de obra, suplantadores, cancones, monstruos manufacturados para matarse unos a otros, repulsivos trasgos producidos por una horda de lujurias capitalistas mediante nuestra prostituida mano de obra.
La belleza de la música hay que escucharla dos veces.
Pero el fuego de la tierra ha sido creado por Dios para beneficio del hombre, para mantener en él la centella de la vida y para ayudarle en las artes útiles, mientras que el fuego del infierno es de otra calidad y ha sido creado por Dios para torturar y castigar al impenitente pecador.
No serviré por más tiempo a aquello en lo que no creo, llámese mi hogar, mi patria o mi religión. Y trataré de expresarme de algún modo en vida y arte, tan libremente como me sea posible, tan plenamente como me sea posible, usando para mi defensa las solas armas que me permito usar: silencio, destierro y astucia.
¿Y si la hubiera juzgado con demasiada severidad? ¿Y si fuera su vida un simple rosario de horas, sencillo y extraño como la vida de un pájaro alegre a la mañana, inquieto por el día, cansado a la puesta del sol? ¿Y si fuera su corazón simple y voluntarioso como el de un pájaro?
Los caminos del Creador no son nuestros caminos, dijo Mr. Deasy. Toda la historia humana se dirige hacia una gran meta, la manifestación de Dios.
Todo es demasiado caro cuando no se necesita.
Los astutos juncos susurran un nombre a la noche, el nombre de ella, y toda mi alma es una delicia, vergüenza que se desmaya.
La historia es una pesadilla de la cual estamos intentando despertarnos.
Nunca había hablado con ella, si exceptuamos esas pocas palabras de ocasión, y, sin embargo, su nombre era como un reclamo para mi sangre alocada.
Toda la vida es una conquista, la victoria de la pasión humana sobre los mandamientos de la cobardía.
Las drogas te envejecen después de la agitación mental. Letargo luego. ¿Por qué? Reacción. Toda una vida en una noche. Gradualmente te cambia el carácter.
Etiqueta ante todo. Mata a su madre pero no se va a poner unos pantalones grises.
No sabía si llegaría o no a hablarle, y si le hablaba, cómo le iba a comunicar mi confusa adoración. Pero mi cuerpo era un arpa y sus palabras y sus gestos eran como dedos que recorrieran mis cuerdas.
Las más satisfactorias relaciones de lo sensible deben por tanto corresponderse con las fases indispensables de la aprehensión estética. Si podemos encontrar éstas, habremos hallado las cualidades de la belleza universal.
La fuerza, el odio, la historia, todo eso. Eso no es vida para los hombres y las mujeres, insultos y odio. Y todo el mundo sabe que es precisamente lo contrario lo que es la vida de verdad.
La irresponsabilidad es parte del placer del arte. Es la parte que las escuelas no saben reconocer.
Una imagen estética se nos presenta ya en el espacio o ya en el tiempo. Lo que es perceptible por el oído se nos presenta en el tiempo; lo visible, en el espacio. Pero, temporal o espacial, la imagen estética es percibida primero como un todo delimitado precisamente en sí mismo, contenido en sí mismo sobre el inmensurable fondo de espacio o tiempo que no es la imagen misma.
He puesto tantos enigmas y acertijos que la novela mantendrá ocupados a los profesores durante siglos, discutiendo acerca de lo que quise decir. Esa es la única forma de asegurarse la inmortalidad.
¿Qué hay en un nombre? Eso es lo que nos preguntamos en la niñez cuando escribimos el nombre que nos han dicho es el nuestro.
La ausencia hace al corazón más joven.
Los hombres se rigen por las líneas de intelecto, las mujeres por las curvas de la emoción.
Mi niñez se inclina a mi lado. Demasiado lejos para que yo apoye una mano en ella por una vez ligeramente.
Sólo habría podido decirte: eres mi amigo, mi buen y querido amigo. Lo siento mucho, pero estoy enamorado de ella. (Con un repentino gesto de fervor) La amo y te la voy a arrebatar como sea, porque la amo.
Una ola de una alegría más tierna escapó de su corazón para correrle en cálido torrente por las arterias. Como el tierno calor de las estrellas, rompieron a iluminar su memoria.
Su alma está lejos. Es quizás tan doloroso ser despertado de una visión como nacer.
Ambos pertenecéis a Irlanda, el talento y la fuerza.
Tan sólo el cegador instante de la pasión -la pasión libre, no cohibida, irresistible-, esa es la única salida por la que podemos huir de la miseria de lo que los esclavos llaman vida.
Consíguelo si puedes. No emplearé contra ti ninguna de las armas que el mundo me ofrece. Si la ley que el dedo de Dios ha escrito en nuestros corazones es la que tú dices, yo también soy una criatura de Dios.
Un sacerdote dejaría de ser sacerdote si dejara de advertir a sus fieles qué es lo bueno y qué es lo malo.
Nuestra carne retrocede ante lo que le espanta y responde al estímulo de lo que desea por una simple acción refleja del sistema nervioso.
Tú pretendes meterme esa idea en la cabeza, pero te advierto que yo no tomo mis ideas de los demás.
Los genios no cometen errores. Sus errores son siempre voluntarios y originan algún descubrimiento.
Si Irlanda ha de convertirse en una nueva Irlanda, lo primero que tiene que hacer es volverse europeo.