Frases de Isaac Asimov

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¿No es obvio que el pasado comienza hace un instante? El pasado muerto es sólo otro modo de designar el presente vivo.

La ciencia ha progresado hasta el punto de que las únicas preguntas atinadas que nos quedan son las ridículas. Las preguntas sensatas se han pensado, formulado y respondido hace tiempo.

La suerte favorece sólo a la mente preparada.

Uno se alegra de resultar útil.

No tengo evidencia para probar que Dios no existe, pero sospecho tanto que no existe que no quiero perder el tiempo.

La frase más excitante que se puede oír en ciencia, la que anuncia nuevos descubrimientos, no es ¡Eureka! (¡Lo encontré!) sino: Es extraño.

Si cada año estuviéramos ciegos por un día, gozaríamos en los restantes trescientos sesenta y cuatro.

Solamente una mentira que no esté avergonzada de sí misma puede tener posibilidades de éxito.

Creo que sólo los científicos pueden comprender el universo.

Las normas establecidas con razón y con justicia, pueden dejar de ser útiles al cambiar las circunstancias, pero al permitir que continúen vigentes por la fuerza de la inercia, entonces, no sólo es justo, sino también útil, quebrantar aquellas que nos anuncian el hecho de que son inútiles, o incluso realmente perjudiciales.

¡Quizá! Sus opiniones son suyas, naturalmente. Aún es usted muy joven.

El aspecto más triste de la vida actual es que la ciencia gana en conocimiento más rápidamente que la sociedad en sabiduría.

El hombre debía ser protegido de su propia mente, demasiado prolífica, más que de ninguna otra cosa.

Nos acostumbramos a la violencia, y esto no es bueno para nuestra sociedad. Una población insensible es una población peligrosa.

¿Aquí en la universidad jugáis al tenis? - Tenemos canchas, pero yo no juego. - Bien. Te enseñaré y cuando lo haga, te llamaré profesora Venabili. - Eso es lo que me llamas en clase, de todos modos. - Te sorprenderá lo ridículo que suena en la cancha de tenis.

¡Nunca permitas que el sentido de la moral te impida hacer lo que está bien!

Leída cuidadosamente, la biblia es la fuerza más potente para el ateísmo jamás concebida.

La mojigatería no es más que la cara opuesta de la lascivia.

- ¿El interés humano... de los robots? Esto es una contradicción. - No, doctora, de usted. - También me han llamado robot. Con seguridad le habrán dicho a usted que no soy humana.

La vida es agradable. La muerte es pacífica. Lo problemático es la transición.

Los postulados están establecidos por la suposición y reforzados por la fe. Nada en el Universo puede conmoverlos.

Espera mil años y verás que se vuelve preciosa hasta la basura dejada atrás por una civilización extinta.

Examinen fragmentos de pseudo ciencia y encontrarán un manto de protección, un pulgar que chupar, unas faldas a las que agarrarse. Y, ¿qué ofrecemos nosotros a cambio? ¡Incertidumbre! ¡Inseguridad!

Aquella masa de solidificada razón de dieciséis kilómetros de longitud, a la que los hombres llamaban multivac, el más complejo ordenador jamás construido.

Cuando la ciencia era joven y las complejidades del conocimiento estaban al alcance de una mente individual, tal vez no se necesitara dirección. El vagabundeo a ciegas por lo parajes inexplorados de la ignorancia podía conducir a maravillosos hallazgos accidentales.

¿No le parece vergonzosa la forma en que esta gente se alababa a sí misma? -dijo-. ¿Quién sería lo suficientemente estúpido como para creerse los alardes de una persona acerca de sus propios productos?

Se intenta planear todas las posibilidades infinitas de todos los podría haber sido, y se elige un podría haber sido.

Necesitamos todavía el hombre que sea lo bastante inteligente para pensar en las preguntas adecuadas.

No tiene alma y nadie sabe lo que es capaz de pensar.

No se puede conseguir una imagen del universo entero salvo estudiando todo el universo.

Cuanto más cercana a la verdad, mejor será la mentira, y la misma verdad, cuando puede utilizarse, es la mejor mentira.

Le faltaba irregularidad, le faltaba el caos de la vida permanente en la que una habitación, o incluso sólo una mesa, se adapta a las sinuosidades y fluctuaciones de una personalidad particular.

En primer lugar acabemos con Sócrates, porque ya estoy harto de este invento de que no saber nada es un signo de sabiduría.

No es necesario hacer el bien. Sólo se trata de no hacer el mal.

Vale la pena ser obvio, especialmente si eres famoso por tu sutileza.

El rendirse a la ignorancia y llamarla dios siempre ha sido prematuro y sigue siéndolo hoy día.

La Auto-Educación es, estoy convencido, el único tipo de educación que existe.

Terminas por ser un absoluto ignorante en todo, excepto en tu estrechísima especialidad.

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