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Negar un hecho es lo más fácil del mundo. Mucha gente lo hace, pero el hecho sigue siendo un hecho.
Isaac Asimov
Cualquier sistema como la Eternidad, que permite a los hombres elegir su propio futuro, terminará eligiendo la seguridad y la mediocridad, y en esa Realidad las estrellas están fuera del alcance. La mera existencia de la Eternidad elimina de un plumazo el Imperio Galáctico. Para restaurarlo, debe acabarse con la Eternidad.
Si el conocimiento crea problemas, no es a través de la ignorancia que podamos resolverlos.
Los hombres que se acostumbran a preocuparse por las necesidades de unas máquinas, se vuelven insensibles respecto a las necesidades de los hombres.
En boca de Salvor Hardin, en su libro Fundación:
Dudo que la computadora llegue algún día a igualar la intuición y capacidad creativa del sobresaliente intelecto humano.
He observado que hombres perfectamente capaces están todavía llenos de prejuicios en nuestra sociedad; necesitamos todavía el hombre que sea lo bastante inteligente para pensar en las preguntas adecuadas.
Y acaso queden por venir otros períodos de mutaciones más frecuentes; y quizá en el juego de la competencia evolutiva no figuremos siempre nosotros entre los ganadores.
Pero, ¿por qué no? Una inteligencia preclara no es forzoso que vaya siempre unida a un gran espíritu. Entre los científicos hay bellacos, como en cualquier otro grupo.
La ciencia es una sola luz, e iluminar con ella cualquier parte, es iluminar con ella el mundo entero.
Un sutil pensamiento erróneo puede dar lugar a una indagación fructífera que revela verdades de gran valor.
En boca de Andrew Martin, en el cuento El hombre bicentenario:
Solo hay una guerra que pueda permitirse la especie humana: La guerra contra su propia extinción.
Nada altera mi concentración. Podrías hacer una orgía en mi oficina y yo no miraría. Bueno, quizá una vez.
- La campaña de Quinn se basará en su suposición de que soy un robot. - ¿Cómo lo sabe? -exclamó John abriendo los ojos-. ¡Es imposible! ¡No puedo creerlo!
Yo soy capaz de reconocer los aspectos positivos de la influencia de las religiones a lo largo de la historia. Por ejemplo, les debemos la creación de calendarios racionales que tan útiles han sido, aunque sinceramente, soy incapaz de recordar alguno más.
La violencia es el último refugio del incompetente.
En cualquier caso, en la Historia no hay finales felices, solo momentos críticos que se superan.
Todo ser humano bueno, con conciencia social y sentido de la responsabilidad, deberá someterse a la autoridad constituida; obedecer a su doctor, a su Gobierno, a su psiquiatra, a su compañero; aunque sean un obstáculo a su comodidad y seguridad.
Es el cambio, el cambio continuo, el cambio inevitable, el factor dominante de la sociedad actual.
Un robot debe proteger su propia existencia, hasta donde esta protección no entre en conflicto con la primera o segunda Leyes.
Un científico es un hombre tan endeble y humano como cualquiera; sin embargo, la búsqueda científica puede ennoblecerle, incluso en contra de su voluntad.
Para tener éxito, la planificación sola es insuficiente. Uno debe improvisar también.
Qué dañina es la especialización excesiva -dijo Seldon casi como si murmurara para sí-. Recorta el conocimiento por un millón de sitios y lo deja sangrando.
Para vencer, la planificación por sí sola no basta. Uno debe improvisar.
La ciencia se construye a partir de aproximaciones que gradualmente se acercan a la verdad.
Las tres leyes de la robótica son:
Si nunca nos atrevemos a cambiar pensando que ese cambio puede ser a peor, entonces no queda la esperanza de escapar jamás de la injusticia.
Escribir para mi es simplemente pensar con mis dedos.
El hombre más irremediablemente estúpido es aquel que ignora su sabiduría.
Escribo por la misma razón que respiro... porque si no lo hiciera, moriría.
Hace falta mucho arte para crear algo que parezca desprovisto de arte.
Si fuese posible crear un robot capaz de ser funcionario civil, creo que haríamos un gran bien, ya que las Leyes de la Robótica le impedirían dañar a un ser humano, lo incapacitarían para la tiranía, la corrupción, la estupidez, el prejuicio.
Las secciones siguen existiendo durante millones de siglos hasta que toda la vida se haya extinguido, y más allá aún. No hay fin para la Eternidad. Por eso se llama Eternidad.
Primero el Señor creó el tipo más bajo, los humanos, formados más fácilmente. Poco a poco fue reemplazándolos por robots, el siguiente paso, y finalmente me creó a mí, para ocupar el sitio de los últimos humanos. A partir de ahora, yo sirvo al Señor.
El peligro es que un hijo nacido en el trono casi con seguridad se echa a perder. Recibe demasiados halagos y demasiado poder, y confunde el accidente del nacimiento con las realizaciones de valor.
No tengo miedo a los ordenadores. A lo que tengo miedo es a la falta de ellos.
Me parece que el avance de la civilización no es más que un ejercicio en la limitación de la intimidad.
Qué pena, el ahora no dura, ni siquiera en la Eternidad.
Realmente, casi no es necesario que hagamos el bien. Lo que hace falta es que dejemos de hacer el mal.