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Es un gran error suponer que una mujer sin corazón sea fácil de contentar en los asuntos amorosos.
Harriet Beecher Stowe
¡Ay, con qué frescura, con qué solemnidad y belleza, nace cada nuevo día! Como si dijera al hombre insensato ¡Mira, tienes otra oportunidad! ¡Lucha por conseguir la gloria inmortal!.
Los libros no se han hecho para servir de adorno: sin embargo, nada hay que embellezca tanto como ellos en el interior del hogar.
Las lágrimas más amargas que se derramarán sobre nuestra tumba serán las de las palabras no dichas y las de las obras inacabadas.
Cualquier persona capaz de sentir verdadera pena es capaz de hacer el bien.
Vosotros los políticos tenéis una forma de darle la vuelta a una cosa sencilla; y no lo creéis ni vosotros mismos a la hora de ponerlo en práctica.
Las horribles crueldades y ultrajes que de vez en cuando consiguen publicar en la prensa ¿Cómo se producen? En muchos casos, es por un endurecimiento paulatino de ambas partes, donde el amo se hace cada vez más cruel y el sirviente cada vez más insensible. Los azotes y el maltrato son como el láudano: hay que duplicar la dosis cuando se pierde sensibilidad.
No hay nadie más supersticioso que un hombre ateo.
La humanidad se presenta hoy día de muchas maneras peculiares, y no hay límite a las cosas extrañas que dice y hace la gente humanitaria.
Si los tratas como perros, conseguirás que trabajen y se comporten como perros. Trátalos como hombres, y conseguirás que trabajen como hombres.
La salud de la mujer es su capital.
Todos los lugares donde las mujeres son excluidas tienden a descender al barbarismo, pero en el momento que ella se introduce, viene con su cortesía, limpieza, sobriedad y orden.
El pasado, el presente y el futuro son en realidad uno: son hoy.
Existen en este mundo algunas almas benditas, cuyas penas se convierten en alegrías para los demás y cuyas esperanzas terrenales, colocadas en la tumba con abundantes lágrimas, son una semilla de la que brotan flores y bálsamos curativos para los desolados y los afligidos.
No es más cierto de esta raza que de cualquier raza oprimida del mundo. El esclavo siempre es un tirano si se le brinda la ocasión.
El camino más largo tiene su fin; la noche más lúgubre acaba con la llegada de la mañana. El paso eterno e inexorable del tiempo siempre acerca el día de los malvados hacia la noche eterna y la noche de los justos hacia el día eterno.