Imágenes
Un hombre como Picasso estudia un objeto como un cirujano disecciona un cadáver.
Guillaume Apollinaire
Oh puertas de tu cuerpo, son nueve y las he abierto todas. Oh puertas de tu cuerpo, son nueve y para mí se han vuelto a cerrar todas.
No se puede llevar consigo a todos sitios el cadáver del padre.
Incertidumbre, iremos lejos y alegres, sin volver jamás, Así como van los cangrejos; De para atrás... De para atrás...
Delfines, jugáis en el mar, Pero las olas son amargas. ¿A veces brota mi alegría? La vida es siempre despiadada.
Fotografía tú eres la sombra del sol, que es su belleza.
Cuando el hombre quiso imitar el andar, creó la rueda, que no se parece en nada a una pierna.
La angustia del amor te aprieta la garganta como si no debieras nunca más ser amado.
Ante todo, los artistas son los hombres que quieren llegar a ser humanos.
Acerquense al borde, les dijo. No podemos, tenemos miedo, contestaron. Acerquense al borde, repitio. Y se acercaron. Él los empujó... y levantaron vuelo.
En los estanques y en las charcas, Cuánto tiempo vivís, ¡Ah carpas! ¿Acaso la muerte os olvida, peces de la melancolía?
Tuve el valor de mirar hacia atrás. Los cadáveres de mis días marcan mi camino y les voy llorando.
Mi vaso se ha quebrado como una carcajada.
Reconócete esta adorable persona eres tú debajo de un gran sombrero Canotier ojos nariz boca este es el óvalo de tu rostro tu exquisito cuello por fin, también la imagen de tu busto adorado visto como a través de una nube. Lo que bate, un poco más abajo, es tu corazón.
La verdad es que el heresiarca era semejante a todos los hombres, pus todos son a la vez pecadores y santos, cuando no son criminales y mártires.
Las horas pasan lentamente como el desfile de un entierro.