Imágenes
Ningún tormento sería para mí tan grande como estar solo en el Paraíso.
Goethe
Si quieres ser mejor que nosotros, querido amigo, ¡viaja!
Aquellos que ven en cada desilusión un estímulo para mayores conquistas, ésos poseen el recto punto de vista para con la vida.
¡Oh, dulce vida, hermosa y amable costumbre del ser y del obrar! ¿Debo separarme de ti?
Aquí abajo habría menos amarguras si los hombres no se dedicasen con tanto ahínco a recordar dolores antiguos, en vez de soportar con entereza los presentes.
¡Qué pobres hombres son los que dedican toda su alma a los cumplimientos y cuya única ambición es ocupar la silla más visible de la mesa! Se entregan con tanto ahínco a estas tonterías que no tienen tiempo para pensar en los asuntos verdaderamente importantes.
El amor no se domina; se cultiva.
La libertad es como la vida, sólo la merece quien sabe conquistarla todos los días.
La bondad es la cadena de oro que enlaza a la sociedad.
Todo nos falta cuando nos faltamos a nosotros mismos.
Y si el amor, bajando de lo alto, hasta su pecho ha entrado, lo acogerán en su coro los bienaventurados.
No es hacer lo que nos gusta, sino que nos guste lo que hacemos, lo que convierte la vida en una bendición.
La vida nos enseña a ser menos rigurosos con los demás y con nosotros mismos.
El que con perspicacia reconoce la limitación de sus facultades, está muy cerca de llegar a la perfección.
Creo en Dios. ¡Hermosas y loables palabras! Pero reconocerlo dónde y de la manera que El se revela, ¡ésta es la verdadera felicidad en este mundo!
Para poder resignarse es menester carácter.
El espíritu humano avanza de continuo, pero siempre en espiral.
Siempre resta a cada uno suficiente fuerza para alcanzar aquello de que está convencido.
Las fatigas de la vida nos enseñan únicamente a apreciar los bienes de la vida.
El problema que plantea el instinto de los animales sólo puede explicarse mediante la noción de mónadas y entelequias.
Haz sólo lo que sea justo, lo demás vendrá por sí solo.
Con todas las fuerzas en contra, perseverar. Jamás doblegarse. Mostrarse fuerte atrae el auxilio de los dioses.
Es preciso haber encontrado una cosa para saber dónde está.
Con el conocimiento se acrecientan las dudas.
Una aventura es siempre algo extraordinario para el que tiene el alma aventurera.
Estamos aquí para tornar imperecedero lo perecedero; y esto puede suceder sólo si se saben valorar ambas cosas.
El talento se cultiva en la calma; el carácter se forma en las tempestuosas oleadas del mundo.
Preciso es que el placer tenga sus penas, y el dolor sus placeres.
Es más fácil tejer una corona, que encontrar una cabeza digna de ella.
Vivir sin un ideal es vivir a medias.
Cuando se tiene en la cabeza una obra grande, nada puede subsistir a su lado; se rechazan todos los demás pensamientos y hasta la vida pierde su serenidad.
Pensar es más interesante que saber, pero menos interesante que mirar.
Buscad dentro de vosotros y lo encontraréis todo, y alegraos de que allá fuera, o como queráis llamarlo, haya una naturaleza que diga sí y amén a todo cuanto habéis hallado en vosotros.
Quien hace el bien desinteresadamente siempre es pagado con usura.
El hombre yerra tanto como lucha.
A la modestia le sienta bien un grupo social selecto y cerrado. Ya en un grupo más numeroso el inmodesto se lleva siempre la palma...
El más cercano a la perfección es quien, con penetrante mirada, se declara limitado.
Hay hipótesis en las que la inteligencia y la fuerza imaginativa se ponen al lado delas ideas mismas.
El mal está sólo en tu mente y no en lo externo. La mente pura siempre ve solamente lo bueno en cada cosa, pero la mala se encarga de inventar el mal.
Un hombre no aprende a comprender nada a no ser que lo ame.