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La familia, la casa paterna, es como una iglesia de orden natural, que rara vez niega un alivio y que prepara el alma a consuelos mayores.
Giuseppe Antonio Borgese
La palabrafelicidad dele pronunciarse con terror.
Todo el tiempo que deja de emplearse en pensar en la muerte es tiempo malgastado y perdido.
¿Qué es la riqueza sino es certidumbre de no ser pobre mañana, de poder gastar dinero mañana?
Basta ver a uno rodeado de sus parientes para comprobar que su voz, su fisonomía, todo le pertenece nada más que hasta cierto punto. Se percibe un olor de familia, una sensación de pertenencia a la raza y a la tierra.
Si todo lo que pasa por el magín de los hombres se tradujera en palabras y en hechos, el universo se precipitaría inmediatamente en el Caos.
Son muy pocos los hombres que pasean mirando al cielo y viven pensando en la muerte.
El pensamiento de Dios desciende hasta la soledad y hasta el tedio. Es el maná que llueve en el desierto.